Gemas escogidas de la Fatwa del Sheik ul-Islam Muhammad Ibn Abdul-Wahab At-Tamimi[1].
Tomado de: www.troid.org
Traducido del árabe al inglés: Hisham Ibn Zayd.
Traducido del inglés al español: Musa Abdullah Reyes.
Para: http://www.islam-mexico.net
Fecha de publicación (por primera vez): 27 de abril de 2005.
El noble Sheik fue preguntado acerca del significado de la declaración de Alláh:
“Quienquiera que desee la vida de este mundo y su esplendor; a ellos les pagaremos por completo (el monto de) sus hechos en ella y no tendrán disminución en ella. Ellos son aquellos para quienes no hay nada en el Más Allá sino el Fuego; y vanos son los hechos que hicieron. Y sin efecto queda lo que acostumbraban hacer” (Surah Hood, 11:15-16).
Él replicó:
La gente de conocimiento de los Salaf han mencionado los varios tipos de acciones que la gente puede hace sin ser advertidos del verdadero significado de sus acciones. Un ejemplo de esto serían los buenos hechos que mucha gente hace, tales como dar caridad, mantener los lazos familiares, ser amable hacia la gente y así, salir adelante. De forma similar, evitar la opresión de otros o no hablar mal acerca de ellos, todo lo cual una persona puede hacer sinceramente por Alláh, de cualquier manera, sin estar ansioso por Su recompensa en la próxima vida. Por lo tanto, todo lo que él espera es que Alláh protegerá su riqueza y su familia, o causará que ello (su riqueza) se incremente, o hará que su nombre sea recordado para siempre y así. Él no tiene interés de buscar el Yannah o huir del Nar (Fuego). A tal persona le será dada su recompensa en esta vida y en la siguiente él no tendrá ahí ninguna porción, y éstos son la clase de gente a la que Ibn Abbas se estaba refiriendo cuando él dio el Tafsir de la aleya (arriba mencionada).
Algunos de nuestros Masheiks han malentendido este asunto (de Ikhlas) debido a una expresión que es mencionada en “Al-Iqnaa”[2] en el capítulo de “Niyah” (intención) donde este asunto fue discutido junto con los varios niveles de sinceridad. Por lo tanto, ellos piensan que aquel quien es referido como para ser sincero (en sus acciones) es un elogio de esa persona, por canto esto no es necesariamente el caso. Más bien, lo que el autor quiso decir es que esta persona no hace ostentación; de cualquier manera, sus hechos son inválidos y nulos en la siguiente vida.
El segundo grupo de gente es más numerosos y su condición es más temerosa, son aquellos a quienes el Muyahid (Imám Ibn Abdul Wahab) dijo lo concerniente a lo que la aleya fue revelada; y ello es la persona quien hace un hecho recto y su intención es ostentar para la gente, no la búsqueda de la recompensa en el más allá. Cuando el hadith de Abu Hurayra fue mencionado a Muawiyah acerca de las primeras tres gentes quienes serán arrojadas al fuego del infierno, y ellas son; aquella quien enseñó para que fuera dicho de él que era un escolar, aquella quien dio caridad para que pueda ser dicho de él que era una persona generosa, y aquel quien peleó para que pueda ser dicho de él que es valiente. Él (Muawiyah) dijo al oír el hadith: “Si ésta es la condición de esta gente, entonces ¿qué hay acerca del resto de la humanidad?”. Luego él comenzó a llorar tan profusamente que la gente pensó que ello (el llanto) lo iba a destruir. Entonces cuando él recobró la conciencia, él enjugó su cara y dijo: “Efectivamente Alláh y Su Mensajero hablaron la verdad: “Quienquiera que desee la vida de este mundo y su esplendor; a ellos les pagaremos por completo (el monto de) sus hechos en ella y no tendrán disminución en ella. Ellos son aquellos para quienes no hay nada en el Más Allá sino el Fuego; y vanos son los hechos que hicieron. Y sin efecto queda lo que acostumbraban hacer”[3].
El tercer grupo son aquellos quienes hacen buenos actos, pero que al mismo tiempo intentan algún tipo de ganancia mundana, tales como aquellos quienes llevan a cabo el Hajj, no por Alláh, sino para hacer dinero, o aquel quien hace Hijra por un beneficio mundano o por casarse con una mujer, o aquel quien pelea el Yihad por la búsqueda del botín de guerra. Esta categoría de gente también ha sido mencionada en referencia al Tafsir de esta aleya, y ello ha sido mencionado en Al-Bukhari de los hadiths del Mensajero (SAW): “Destruido sea aquel quien adora el Dinar, destruido sea aquel quien adora el Dirham”[4]. Así también, una persona puede aprender o puede enseñar el Corán para que su familia pueda ganar posición de liderazgo, o él frecuenta la Masjid porque él trabaja para la Masjid, como es el caso de mucha gente. Esta gente es más inteligente que el segundo grupo porque ellos hacen hechos que satisfacen sus intereses personales, mientras que los otros hacen hecho para que puedan ser alabados y glorificados por la gente, sin embargo, ellos no ganan nada en realidad. El primer grupo muestra más inteligencia que los otros dos grupos porque ellos hacen hechos que son sinceramente por Allá, sin cometer ninguna clase de Shirk, de cualquier manera ellos no deseaban el bien abundante que es perpetuo, el cual es el Yannah, ni ellos esperaban huir del gran castigo el cual es el Nar.
La cuarta categoría son aquellos quienes hacen actos de obediencia que son sinceramente por Alláh, de cualquier forma ellos cometen simultáneamente actos de Kufr, los cuales los ponen fuera del manto del Islam, tales como los judíos y los cristianos, o mucha gente de esta Ummah, quienes adoran a Alláh, dan caridad y ayunan, todo por Alláh y Su recompensa en la siguiente vida. De cualquier manera, ellos cometen actos de Shirk o Kufr que los ponen fuera del manto del Islam o previene a sus hechos de ser aceptados. Estos son aquellos a quienes Anas Ibn Malik ha incluido cuando él dio el Tafsir de esta aleya. Por lo tanto algunos de los Salaf acostumbran decir: “Si yo solamente supiera que Alláh aceptó una Sajdah de mí, yo inmediatamente desearía la muerte porque Alláh dice: “Efectivamente, Alláh acepta de aquellos quienes son piadosos” (Suratul Maidah, 5:27)”.
De cualquier manera, ahí queda el asunto de aquellos quienes rezan los cinco Salawat, dan el Zakat, ayunan, llevan a cabo el Hajj, todo por Alláh; pero posteriormente comienzan a hacer estos actos de adoración por razones mundanas, tales como aquel quien lleva a cabo el Hajj por dinero, como es realidad en el presente día. En tal situación, depende de cuál de las dos intenciones domine a la otra. Esto es porque algunos de los escolares han dicho que el Corán siempre menciona a la gente quienes son indudablemente del Yannah y a la gente quienes son indudablemente del Nar, y que permanece en silencio acerca del destino de aquellos quienes poseen rasgos de ambas partes (de la gente del Yannah y de la gente del Nar). Y Alláh sabe lo mejor.
[1] De “Fatwa wa masail Al- Imám Muhammad Ibn Abdul-Wahab”, páginas 5-8.
[2] (Nota del Traductor) Un libro de fiqh Hanbali.
[3] Sahih At-Tirmidi (hadith no. 1492)
[4] Al-Bukhari (hadith no. 5955)