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Regalar la recitación de todo el Corán para el Profeta Muhammad (صلى الله عليه وسلم)
Una explicación de las cosas legisladas en el final del Ramadán
Autor: Imám Muhammad Ibn Salih Al-Uthaymin.
Fuente: Majalis Shahr Ramadan (páginas 41-43).
Trad. al Español: Musa Abdullah Reyes para http://www.islam-mexico.net
De la sabiduría de ayunar es que: ello es un acto de adoración hecho para Alláh, en la cual el Abd (sirviente) está más cercano a Su Señor por abandonar las cosas que él ama y desea, tales como la comida, la bebida y el intercambio sexual. Así que, por cause de esto, la veracidad de su Fe y la totalidad de su servidumbre hacia Alláh se vuelve evidente, tanto su amor por Alláh y su anhelo por lo que Alláh ha preparado para él (de bueno). Esto es desde que aquel quien ayuna no abandona algo que sea amado para él, excepto por aquello lo cual es más grande para él (lo cual es Alláh). Cuando el creyente sabe que el contento de Alláh yace en el ayuno, lo cual es abandonar aquellos deseos que él naturalmente ama, él dará precedencia al contento de Su Señor sobre sus deseos. Así que si él abandona sus deseos, no importa cuanto los anhele y añore por ellos, porque su deleite y la tranquilidad de su alma yace en su abandono de todo aquello por Alláh.
Debido a esto, muchos de los creyentes, si uno de ellos fuera vencido o forzado a romper su ayuno durante un día durante el Ramadán sin una excusa válida, él no rompería su ayuno. Así que esto es de los más grandes y profundos aspectos de sabiduría detrás del ayuno.
Y de la sabiduría detrás del ayuno es que ello significa el atar la Taqwa, como Alláh dice: “¡Oh, ustedes quienes creen! El ayuno está prescrito para ustedes como estaba prescrito para aquellos antes de ustedes, en orden a que ustedes ganen Taqwa”. Esto es desde que una persona quien está ayunando le fue ordenada hacer los deberes obligatorios y evitar los actos pecaminosos. El Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo: (Reportado por Al-Bukhari) “Así que cuando una persona está ayunando, cada vez que él desea hacer un acto pecaminoso, él recordará que está ayunando y esto lo alejará de ello. Esto es el por qué el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) ordenó a la persona quien está ayunando, cuando sea maldecido y abusado, el decir, “Estoy ayunando”, previniéndole a él (al que insulta) que una persona ayunando se le ha ordenado el refrenarse de maldecir e insultar y recordarse a sí mismo que él está ayunando y no puede contar con la maldición.
Y de la sabiduría detrás del ayuno, es que el corazón se vuelve hacia la contemplación y remembranza (de Alláh). Esto es desde que los deseos de uno llevan al descuido y quizá el corazón se endurece y se enceguece ante la verdad. Esto es el por qué el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) nos advirtió para comer y beber un poco, donde él dijo: “El Hijo de Adam no siente un peor vacío que el de su estómago” (Reportado por Ahmad, An-Nasai e Ibn Mayah).
Y en Sahih Muslim, Handhala Al- Usaidi (Radialahu anhu) quien era uno de los escribas del Mensajero de Alláh (Assalalahu alayhi wa Salaam), le dijo al Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam): “Handhala se ha vuelto un hipócrita”. Así que el Mensajero de Alláh (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo: “¿Por qué es esto?”. Así que él dijo: “¡Oh Mensajero de Alláh, cuando estamos contigo, tú nos recuerdas el Fuego del Infierno y el Paraíso, como si nosotros los viéramos con tus propios ojos. Pero cuando nos separamos de ti, encontramos a nuestras esposas y a nuestros niños y nuestros hogares y olvidamos mucho (de lo que hemos oído de ti)”. En la última parte del hadith, el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) le dijo: “Pero oh, Handhala, hay un tiempo para esto y un tiempo para aquello (tres veces)”. Abu Sulaima Ad-Darani dijo: Efectivamente, cuando el alma tiene hambre y sed, el corazón se ensuavece y se vuelve puro. Y cuando ella es alimentada, el corazón se vuelve ciego”.
Y de la sabiduría detrás del ayuno es que la persona quien tiene riqueza es encausada para realizar la bendición de la riqueza que Alláh ha conferido a él, tal como Alláh lo bendijo con comida, bebida e intercambio sexual. Mucha gente está privada de estas cosas, así que él debería alabar a Alláh por estas bendiciones y agradecerle por garantizarlas para él. Y él debería recordar a su hermano quien es pobre y quien probablemente va a lo largo del día privado y hambriento. Así que él debería ser generoso hacia él y darle caridad, para que pueda vestir su desnudez y satisfacer su hambre.
Y de la sabiduría detrás del ayuno es que el alma está vencida y restringida de tener orgullo, hasta el punto en que se humilla a sí misma a la verdad y se suaviza a sí misma ante la creación. Esto es porque el comer, el beber y tener intercambio sexual con mujeres, todas estas cosas acercan la insolencia, arrogancia, vanidad y orgullo sobre la gente y sobre la verdad. El alma se preocupa de sí misma con tratar de obtener estas cosas por su necesidad de ellas. Así que cuando obtiene estas cosas, el alma siente que ha conquistado lo que desea y así cae en la felicidad y en el orgullo que es condenado. Y esto es una causa para su destrucción. Solamente a aquellos quienes Alláh protege están salvados de esto.
Y de la sabiduría detrás del ayuno es que los pasadizos de la sangre (en el cuerpo) se vuelven más estrecho debido al hambre y a la sed, así que por lo tanto los pasadizos del Demonio en el cuerpo humano también se vuelven más estrechos. Esto es desde que el Demonio fluye a través del hijo de Adam como el fluir de la sangre, como está auténticamente registrado en las dos colecciones Sahih. Así que al ayunar los susurros del Demonio sometido y la fuerza de los deseos de uno y la ira son subyugados. Esto es el por qué el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo: “¡Oh hombres jóvenes! Quienquiera de entre ustedes que pueda tener (lo suficiente) disponible, debería casarse, porque ello es la mejor forma para bajar la mirada y la mejor forma de mantener las partes privadas (de uno) castas. Pero quienquiera que no sea capaz de casarse, entonces déjenlo ayunar, porque ello tiene protección”.
Y de la sabiduría detrás del ayuno están los beneficios en la salud que viene como resultado de ello, lo cual está adherido en tomar poca comida, permitiendo al sistema digestivo para descansar por un tiempo específico, lo cual deja que el exceso de desperdicios y excrementos que son dañinos para el cuerpo, sean descargados.
¡Así que cuán grande y profunda es la sabiduría de Alláh, y cuan beneficiosas son Sus Órdenes para Sus criaturas!
Oh Alláh, danos comprensión de Tu Religión y permítenos entender los secretos íntimos de Tus órdenes. Rectifica para nosotros los asuntos de Tu Religión y nuestra vida mundana, y perdónanos a nosotros y a nuestros padres y a todos los musulmanes, por Tu Misericordia, Oh Más Misericordioso. Y que la paz y las bendiciones de Alláh sean sobre Muhammad (Assalalahu alayhi wa Salaam) y sobre su familia y todos sus Compañeros.
Reglas pertenecientes a llevar a cabo el ayuno
Contribuido por: Sheik Salih Al-Fawzan.
Localizado en: http://www.salafisocietydc.org/index.php?option=com_content&task=view&id=28&Itemid=24
Tomado de: www.fatwa-online.com.
Fuente: Al-Mulakhkhas al-Fiqhi, Volumen 1, Páginas 271-272
Traducido (del inglés al español) por: Musa Abdullah Reyes H.
Para: www.islam-mexico.net.
Quienquiera que rompa el ayuno o es incapaz de ayunar durante el Ramadán debido a una razón permisible islámicamente, entonces él es requerido para llevar a cabo por este día, tal como aquel cuyo ayuno es nulificado debido a haber tenido una relación sexual u otra cosa que ello. En ese caso, él es requerido para llevar a cabo el ayuno por este día, como Alláh (عز و جل) dice:
“…el mismo número (debería ser llevado a cabo) de entre otros días” (Surah Al-Baqarah:184).
Es recomendado que él se apresure en llevar a cabo aquello lo cual él perdió durante el Ramadán así como para que se alivie de su responsabilidad. Similarmente, es recomendado que él lleve a cabo por aquello lo cual él alivió por ayunar consecutivamente porque hacerlo así es como haber ayunado como tal (durante el Ramadán).
Sin embargo, si él no lleva a cabo inmediatamente por aquello lo cual él ha perdido, entonces es permisible para él el demorarlo. Esto es porque el tiempo disponible (para llevar a cabo los ayunos perdidos) está abierto (hasta antes del arribo del siguiente Ramadán).
Respecto a tales obligaciones acerca de las cuales el tiempo disponible para llevarlas a cabo lo cual es obligatorio sobre una persona está abierto, entonces es permisible el demorar su cumplimiento tanto como exista una firme intención de llevarlo a cabo. También es permisible el cumplir los días intermitentemente. Sin embargo, si no hay suficiente tiempo restante durante el mes de Shaban precedente del siguiente Ramadán, se vuelve obligatorio el cumplir los días consecutivamente, notando que ya no es permisible el demorarlo hasta el arribo del siguiente Ramadán sin una razón islámicamente aceptable.
Es narrado sobre la autoridad de Aishah, que ella dijo:
“Yo acostumbraba tener días para cumplir del Ramadán, y solía ser que yo era incapaz de llevarlos a cabo hasta Shaban” (Su autenticidad está acordada por Al-Bukhari y Muslim).
Así que este hadith indica que el periodo de tiempo durante el cual es permisible el llevar a cabo los días perdidos durante el Remadán está abierto (hasta antes del arribo del siguiente Ramadán). Si él demoró en recuperar los ayunos hasta el arribo del siguiente Ramadán, entonces es requerido el ayunar el ayuno actual de Ramadán y luego recuperar por los ayunos perdidos de los años previos posteriormente. Esto es en adición a alimentar a una persona pobre con medio Saad de la comida de la tierra por cada día (que reste hasta que se cumpla). Y si la causa de esta demora en recuperar los ayunos hasta el arribo del siguiente Ramadán es aceptable islámicamente, entonces él es simplemente requerido para recuperar los días perdidos del Ramadán previo.
Si él muriera antes del arribo del siguiente Ramadán, mientras él aún tenga ayunos que llevar a cabo del Ramadán previo, entonces no hay nada requerido de él desde que él murió dentro del tiempo límite permitido en el cual llevar a cabo los ayunos perdidos.
Similarmente, si él muriera después del arribo del siguiente Ramadán y la razón para la demora es islámicamente aceptable, tales como la enfermedad y el viaje, entonces no hay nada requerido de él (de la propiedad (riqueza) que él deje detrás).
Sin embargo, si la razón para esta demora era islámicamente inaceptable, entonces es obligatorio el pagar una penalidad de la propiedad (riqueza) que él ha dejado detrás, suficiente para alimentar una persona pobre para cada ayuno que quede para ser cumplido.
Adicionalmente, si él muere mientras tenga cualquiera de los ayunos para ser llevado a cabo, tales como el ayuno de rescate o un ayuno obligatorio por cualquiera de los defectos llevados a cabo en el Hayy, entonces él es requerido para alimentar a una persona pobre por cada ayuno restante para ser cumplido. Esto es hecho de la propiedad (riqueza) que él ha dejado atrás, notando que nadie es requerido para cumplir los ayunos en su nombre. La razón para esto es que este tipo de ayuno no permite a alguien más el ayunar en su nombre mientras él está vivo, y similarmente es el caso sobre su muerte. Y esta es la opinión de la gente de conocimiento.
Y quienquiera que muera mientras él tenga cualquier ayuno para cumplir debido a un juramento o a una promesa que él haya tomado, entonces es recomendado para aquel a cargo de sus asuntos después de su muerte para ayunar en su nombre como está confirmado en ambos Al-Bukhari y Muslim. Una mujer vino al Profeta (صلى الله عليه وسلم) y dijo: “Mi madre ha muerto mientras tenía ayunos para ser cumplidos debido a una promesa que ella hizo. ¿Debería yo ayunar en su nombre?”. Él (صلى الله عليه وسلم) dijo: “Sí”. Con referencia a aquel a cargo de sus asuntos después de la muerte, entonces esto implica al heredero.
Viendo la luna (para comenzar el Ramadán)
Pregunta: ¿Deberíamos ayunar y terminar nuestro ayuno de acuerdo a la vista de la luna nueva en Arabia Saudita o deberíamos hacerlo de acuerdo a la vista de la luna nueva en el país donde estamos?
Respuesta: Hay tantas como seis diferentes opiniones entre los escolares concernientes a este asunto. De cualquier forma hay dos puntos de vista. El primero es que cada uno debería ver la luna en su propio país y aquellos países donde la luna se eleva al mismo tiempo deberían seguirlos. La razón para esto es que el tiempo al cual la luna se eleva, varía de lugar en lugar. La segunda opinión es que el comienzo del nuevo mes necesita ser confirmada solamente en alguno de los países musulmanes. Si la vista de la luna nueva es confirmada en alguno de los países musulmanes, entonces es obligatorio para todos los musulmanes el comenzar el ayuno del Ramadán o terminarlo. De acuerdo a ésta última opinión, si el nuevo mes es confirmado en Arabia Saudita es obligatorio sobre todos los musulmanes, en todas partes del mundo, ayunar si es el inicio de Ramadán y de terminar su ayuno si es el inicio de Shawal. Esta es la opinión más común apoyada por los seguidores del Madhab del Imán Ahmad Ibn Hambal.
De cualquier forma, la primera opinión es más correcta por la evidencia en el Corán, la Sunnah y por la analogía. Con respecto al Corán, Alláh, el Altísimo dice:
“El mes de Ramadán en el cual fue revelado el Corán, una guía para la humanidad y pruebas claras para la guía y el criterio (entre el bien y el mal). Así que quienquiera de ustedes que vea (el creciente de la primera noche de) el mes (de Ramadán) debe observar el Sawm (ayuno) ese mes” (Al-Baqarah 2:185).
Esta última oración es una oración condicional, y la regla contenida en una oración condicional es establecida para quienquiera al que la condición se aplica y es anulada para cualquiera para quien la condición no se aplica. Así que la oración: Así que quienquiera de ustedes que vea (la luna) del mes (de Ramadán) debe observar el Sawm” implica que quienquiera que no la vea no ayuna.
Es bien conocido que entre los astrónomos que el tiempo en el que la luna se eleva difiere de un lugar a lugar. La luna puede ser vista en un lugar y no en otro. Por lo tanto, de acuerdo al verso, quienquiera que no lo vea no está obligado a ayunar.
Con respecto a la Sunnah, el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“Si ustedes la ven (la luna nueva de Ramadán), entonces ayunen y si ustedes la ven (la luna nueva de Shawal) entonces terminen el ayuno. Y si está oscuro para ustedes, entonces completen los treinta días de Shaban”.
Él dijo: “Si ustedes la ven”.
Él por lo tanto ligó la regla a la vista de la luna y si una regla está ligada a una causa efectiva, entonces esa regla es anulada en ausencia de esa causa.
Con respecto a la analogía, nosotros decimos que tanto como los tiempos para comenzar el ayuno y romper el ayuno cada día varía de lugar a lugar, así que, de la misma forma, los tiempos para terminar el ayuno mensual también varían. Nosotros aquí en Ryadh, por ejemplo, comenzamos nuestro ayuno cada día antes que la gente en Al-Hiyaz y también rompemos nuestro ayuno antes que ellos. Es, por lo tanto, obligatorio comenzar el ayuno mientras ellos todavía están comiendo. Si, por lo tanto, cada lugar tiene su propia regla debido a la variación en el tiempo en que el sol se eleva y se pone, lo mismo también aplica debido a la variación en el tiempo que la luna se eleva y se pone.
Por lo tanto, la respuesta para esta pregunta es clara. Es obligatorio para ustedes seguir la vista de la luna nueva en el lugar donde ustedes estén.
Sheikh Ibn Uthaymin
Al-Aqaliyat al-Muslimah, Página 84, Fatwa No.23.
Trad. al español: Musa Abdullah Reyes para http://www.islam-mexico.net
Autor: Abdullah Ibn Salih Al-Fawzan.
Fuente: Ahadith As-Siyam: Ahkam wa Adab (páginas 63-65).
Trad. al español: Musa Abdullah Reyes para http://www.islam-mexico.net
Abu Umamah (Radialahu anhu) reportó que el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“Reciten el Corán porque efectivamente ello (el Corán) vendrá en el Día del Juicio como un intercesor para sus Ashaab (aquellos quienes lo leen, memorizan e implementan)”[1].
Este hadith indica las virtudes de recitar el Corán, la grandeza de su recompensa y que él intercederá por sus portadores en el Día del Juicio hacia su entrada en el Paraíso.
An-Nawas Ibn Samaan (Radialahu anhu) reportó: “Yo escuché al Mensajero de Alláh (Assalalahu alayhi wa Salaam) decir: “El Corán será traído en el Día del Juicio tanto como la gente que acostumbraba actuar sobre él. La Surat ul-Baqarah y Ali Imran entonces las considerarán”. El Mensajero de Alláh los asemejó a tres ejemplos, los cuales no he olvidado después de las guerras. Él (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo: “Como si ellas fueran dos nubes o dos toldos negros y oscuros con una luz entre ellos o como dos bandadas de pájaros agitando sus alas en el aire suplicando por aquel quien las recitó”[2].
Abdullah Ibn Amr (Radialahu anhu) reportó que el Mensajero de Alláh (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo: “El ayuno y el Corán intercederán por el sirviente en el Día del Juicio. El ayuno dirá: “Mi Señor, yo le restringí de la comida y la bebida, así que permíteme interceder por él”. Y el Corán dirá: “Yo le previne de dormir en la noche, así que permíteme interceder por él”. Así que a ellos les será permitido el interceder”[3].
Por lo tanto, es esencial para la persona el ayunar y recitar el Corán mucho durante estos benditos días y honorables noches. Porque, efectivamente, hay una especial virtud por la abundancia de recitación en estos días, la cual no es encontrada en ningún otro mes. Él debería tomar ventaja de la nobleza del tiempo durante este mes, en el cual Alláh reveló el Corán.
Hay un mérito especial para recitar el Corán en las noches del Ramadán. Porque efectivamente, las noches traen un fin al día de asuntos y ocupaciones, el entusiasmo es despertado y el corazón y la lengua se montan sobre la reflexión. Y Alláh es aquel en quien buscamos asistencia.
Es reportado que Yibril acostumbraba encontrarse con el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) durante cada noche de Ramadán y ellos estudiarían el Corán juntos[4]. Así que si hacer Dikr (remembranza de Alláh) fuera mejor que el Corán o igual a ello (en estas noches), ellos lo hubieran hecho todo el tiempo o en ciertos momentos junto con constante concurrencia para esa ocasión.
Así, este hadith ilustra la precedencia de estudiar el Corán durante el Ramadán y concurrir juntos para esa ocasión tanto como dirigirse hacia uno quien es más prominente en la memorización de ello.
Los predecesores de esta Ummah recitaban el Corán constantemente durante el Ramadán. Y cuando ellos ayunaban, se sentaban en el Masjid y decían: “Nosotros guardaremos nuestro ayuno y no murmuraremos de nadie”.
Ellos recitaban el Corán en sus oraciones y fuera de ellas. Uthman (Radialahu anhu) completaba la recitación del Corán (completo) en un día. Y algunos de los Salaf la completaban durante su Qiyam en Ramadán cada tres noches. Algunos de ellos lo hacían cada siete días y algunos cada diez días.
Ash-Shafi completaba el Corán sesenta veces durante el Ramadán, mientras recitaba fuera de la oración. Al-Aswad recitaba el Corán completo cada dos noches de Ramadán. Qatadah siempre completaba el Corán cada siete días. Él lo hacía cada tres días en Ramadán y durante los últimos diez días, lo hacía cada noche. Los reportes concernientes a ello son famosos.
Al-Hafidh Ibn Rajab (rahimahullah) dijo: “La prohibición de recitar el Corán en menos de tres días (como está establecido en un hadith) ha sido mencionada solamente a que sea hecho sobre una base normal. Como por los tiempos específicos que son virtuosos, tales como el mes de Ramadán. Y especialmente las noches entre las cuales la noche de Al-Qadr es vista. O aquellos lugares que son virtuosos, tales como Makkah, para aquel quien entra sin residir ahí, entonces es recomendado recitar el Corán muchas veces en estos tiempos y lugares, buscando los méritos conectados con su tiempo y lugar. Esta es la opinión de Ahmad, Abu Isaac y otros escolares. Y las acciones de otros indican eso como ha sido establecido previamente”[5].
La persona que recita el Corán debe observar las etiquetas propias de la recitación. Algunas de ellas son: él hace su intención sinceramente por Alláh, que lo recite mientras esté en un estado de purificación, que use el Siwak y que lo recite mientras pondera sobre su significado y observando total conciencia. Alláh dice:
“Un Libro, el cual Hemos revelado a ti en orden de que sus versos sean ponderados, para que la gente de entendimiento pueda ser recordada”.
También de las etiquetas de recitación es que uno no detenga su recitación en orden de hablar con alguien más. Efectivamente, cuando mucha gente se sienta a recitar el Corán, y hay gente sentada al lado de ellos, una mayoría del tiempo, ellos detienen su recitación para hablar con sus vecinos. Esto no es propio desde que es apartarse de la recitación sin una razón válida.
Y esto es sobre el que recita, el actuar sobre el Corán, haciendo permisible su Halal y prohibiendo su Haram, así para que el Corán pueda ser una prueba por él en el Día del Juicio e interceder por él en entrar a los jardines de bienaventuranza.
[1] Sahih Muslim.
[2] Reportado por Muslim (804).
[3] Sahih Muslim (804).
[4] Al Bukhari (1/30) y Muslim (2308).
[5] Lataa-if-ul-Maarif, páginas 102-103.
Sheik Muhammad ibn Salih Al-Uthaymin.
Traducido exclusivamente para: http://www.bakkah.netTomado de: http://www.bakkah.netTrad. inglés al español: Musa Abdullah Reyes para http://www.islam-mexico.net
En el Nombre de Alláh, el Todo Misericordioso.
Primera parte.
Después de mencionar la Sunnah de rezar 11 y 13 Rakás para el Tarawi, y que eso es lo mejor, el Sheik Muhammad ibn Salih
Al-Uthaymin dijo:
De cualquier forma, si la gente de la Masjid prefiere que él (el Imám) acorte lo largo de la recitación y lo largo de las reverencias y las
postraciones e incremente el número de Rakás, diciendo: “Verdaderamente esto es más fácil para nosotros”, entonces no hay daño si él está de acuerdo con ellos, debido a la generalidad de la declaración del Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam):
“Hagan las cosas fáciles y no hagan las cosas difíciles”[1].
Y también debido a la generalidad de su (Assalalahu alayhi wa Salaam) declaración:
“Cuando uno de ustedes guíe a la gente (en la oración) entonces déjenlo que acorte (lo largo de la oración)”[2].
Así que en tanto no caigamos en algo prohibido, luego traer la facilidad a aquellos bajo nuestra autoridad es mejor y toma
precedencia. El Imám es el responsable por la Masjid habiendo ido puesto en la autoridad sobre la gente que ora, así él es llamado el Imám. El Imám es
aquel quien tiene autoridad sobre ellos en asuntos relacionados a la oración, por ejemplo, él les ordena establecer las filas y enderezarlas.
Así que si el Imám es requerido para ser fácil sobre ellos por incrementar el número (de Rakás) mientras que acorta las reverencias,
postraciones y recitaciones, entonces no hay daño en ello.
Con esto nosotros debemos decir que no es propio para nosotros que seamos excesivos o negligentes, como alguna de la gente comete Ghuluw (excesos) cuando ellos se apegan a la Sunnah del número (de Rakás) diciendo: “No es permisible el incrementar sobre el número que viene en la Sunnah”, y ellos hablan en la forma más severa contra alguien quien incrementa sobre eso (por rezar más de 11 o 13 Rakás) diciendo que él es un pecador o desobediente. Y no hay duda que esto es un error. ¿Cómo podría él ser pecador o desobediente cuando el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) fue peguntado acerca de la oración de la noche y él dijo: “(Ello es) dos (Rakás) por dos (Rakás)[3]”?
Y él no lo limitó a ningún número dado. Y es bien conocido que una persona quien pregunta acerca de la oración de la noche, no conoce el número (de sus Rakás), desde que aquel quien no sabe cómo rezar la oración de la noche no sabría más correctamente el número (de sus Rakás). Además, él (el que pregunta) no era de los sirvientes del Mensajero (Assalalahu alayhi wa Salaam), así que no podemos decir que él supiera acerca de estos asuntos en su casa.
Así que desde que el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) le dijo a él acerca de la manera que la oración de la noche es para ser rezada, y él no la limitó a ningún número dado, entonces es bien sabido que hay libertad en el asunto, y que un hombre puede aún rezar 100 Rakás y luego perfeccionar el Witr con un Raká.
Como por su (Assalalahu alayhi wa Salaam) declaración:
“Recen como ustedes me han visto rezar”[4].
Luego este Hadith no es irrestricto, aún con aquella gente (quien dice que 11 o 13 es el límite). Así, ellos mismos no dicen que sea obligatorio sobre la gente el llevar a cabo el Witr al rezar cinco Rakás algunas veces, siete Rakás en otras veces y algunas veces nueve. Así que si nosotros entendemos este Hadith en una forma general e irrestricta, entonces tendríamos que decir que es obligatorio el llevar a cabo el Witr rezando exactamente cinco Rakás algunas veces, siete en otras ocasiones y a veces nueve. Además el significado es: “Recen en la manera como ustedes me han visto rezar”. Como para el número de Rakás, luego, no (esto no es entendimiento del Hadith), excepto lo que está limitado por un texto.
De cualquier forma, un hombre no debe ser severo sobre la gente en un asunto que tiene algún margen. Nosotros siempre hemos visto a algunos de los hermanos quienes son severos acerca de declarar a algunos Imams como innovadores, aquellos quienes incrementan sobre 11 (Rakás) y ellos abandonan el Masyid, así perdiendo la recompensa de la que habló el Mensajero (Assalalahu alayhi wa Salaam):
“Quienquiera que se levanta (en oración) con el Imám hasta que él abandona, entonces será escrito para él que se quedó una noche (completa) (en oración)”[5].
Y tal vez ellos puedan sentarse después de haber rezado diez Rakás, causando así un hueco en la fila por quedarse ahí. Y tal vez ellos aún hablen (mientras están sentados) algunas veces, así distrayendo a quienes están rezando. Todos estos (Escenarios) son malos. No tenemos duda de que ellos intentan el bien, ni que fueran Muitahids (buscando llegar a los que es correcto), de cualquier forma, no todo Mujtahid está en lo correcto.
Otro grupo de gente toma la postura opuesta. Ellos hablan muy severa y ásperamente contra aquellos quienes se restringen a sí mismos a 11 Rakás, diciendo: “Ustedes han ido contra el Ijma (consenso de los escolares) y verdaderamente Alláh ha dicho:
“Y quienquiera que contradiga al Mensajero después de la guía que se ha hecho clara para él, y que siga una otro camino diferente al camino de los creyentes, entonces Nosotros lo retornaremos hacia lo cual él se ha volteado, y causará que él entre en Yahanam, ¡Qué mala residencia![6]”.
“Y aquellos antes de ustedes no supieron nada más que 23 Rakás”. Y ellos hablan muy severamente contra ellos. Esto también es maldad[7].
Segunda Parte.
El Sheik Muhammad ibn Salih Al-Uthaymin también dijo, después de afirmar que la Sunnah es rezar 11 Rakás, en otro lugar del mismo libro:
Así, que si alguien dice: “Usted ha establecido que 11 Rakás (es la Sunnah), ¿Entonces qué dice usted si rezamos detrás de un Imám quien reza 23 Rakás o más, nosotros deberíamos permanecer sentados y no rezar con él cundo se levante para el sexto Taslim (después de 10 Rakás), o es mejor terminar (junto) con él?”.
La respuesta: Es mejor completar (la oración) con él y la evidencia para esto es (vista) desde dos ángulos:
El primero es la declaración del Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) acerca de las oraciones nocturnas de Ramadán:
“Quienquiera que se levanta (en oración) con el Imám hasta que él abandona, entonces será escrito para él que se quedó una noche (completa) (en oración)”[8].
Así que quienquiera que permanezca sentado y espere para que el Imám alcance la Oración del Witr, entonces no ha rezado con el Imám hasta que él haya abandonado, ha dejado fuera una porción de su oración.
El segundo ángulo de prueba es la generalidad de la declaración del Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam):
“Verdaderamente el Imám ha sido designado únicamente para ser seguido”[9].
Esto incluye cada acción que el Imám hace, tanto como no sea algo prohibido., e incrementar sobre 11 (Rakás) no está prohibido, así entonces nosotros seguimos al Imám. Por lo tanto, si el incremento es prohibido, como si el Imám rezara 5 Rakás para la Oración del Duhr, entonces, nosotros no lo seguimos.
Además, nosotros debemos saber que la unidad de la Ummah es algo buscado con la más alta prioridad después de la Sharía Islámica, desde que Alláh ha dicho:
“Y esta es su Ummah, una sola Ummah”[10].
Y diferir entre miembros de la Ummah es algo que debe ser rechazado, como Alláh, el Más Alto ha dicho:
“Y no sean como aquellos quienes difieren después de que las pruebas claras vinieron a ellos”[11].
Y Alláh, el Más Alto ha dicho:
“Alláh ha legislado como parte de la Religión lo que ordenó sobre Nuh, lo que te hemos enviado a ti, y lo que ordenamos a Ibrahim, Musa e Isa: que establecieran la Religión y que no se dividieran en ella”[12].
Y Él, el Más Alto ha dicho:
“Verdaderamente aquellos quienes se dividieron sobre la Religión y se convirtieron en sectas, tú no tienes nada que hacer con ellos. Además su asunto es solamente con Alláh, y Él les informará de lo que ellos acostumbraban hacer”[13].
Y el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) acostumbraba decir cuando alineaba a la gente para la oración:
“No difieran, o sus corazones diferirán”[14].
Y cuando Uthman (Radialahu anhu) rezaba las oraciones que tienen 4 Rakás durante el Hajj en Mina, él no las acortaba después de ocho años de que su Khilafah había pasado. La gente detestaba esto diciendo: “El Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) acortaba (su oración), y así lo hacían Abu Bakú y Umar, como tú lo hiciste en el comienzo de tu Khilafah”. Por lo tanto, él (Radialahu anhu) cambió su posición, y aquellos Compañeros que hablaban en contra de esta acción de su oración de cuatro Rakás detrás de él, mientras lo detestaban. Esto fue mientras este incremento era inseparable de la oración, y ello era una cosa maligna para ellos, por lo tanto ellos continuaron siguiendo al Imám prefiriendo la unidad.
¿Así que, qué piensan ustedes acerca de cuando el incremento es separado, no directamente conectado con la oración, y cuando la persona lo hace intencionalmente ello no nulifica la oración? Y él (aquel quien no reza más de 11 o 13 Rakás con el Imám) dice: “Nosotros somos gente quienes nos apegamos a la Sunnah y seguimos las narraciones de los Compañeros” con esta contradicción de sí mismo en este asunto.
Así que yo digo: Seguramente cualquier persona que dice que sigue la Sunnah y la guía de los Salaf, no es para él el abandonar al Imám cuando él reza 23 (Rakás) y dice: “Yo seguiré la Sunnah y rezaré 11 Rakás”, desde que ustedes fueron ordenados para seguir a su Imám, y ustedes han sido prohibidos de contradecirlo. Por lo tanto, ustedes no han sido prohibidos reincrementar sobre 11 Rakás.
Así que entonces es uniéndose sobre los estudiantes de conocimiento específicamente, y sobre toda la gente en general, para estar vigilantes en preservar la unidad siempre que sea posible, desde que la única esperanza para la gente de desobediencia y los criminales es que la gente de bondad difiera. Esto es porque ellos no tienen un arma más efectiva que diferir, y verdaderamente Musa lo dijo a los magos:
“¡Ay de ustedes! No inventen mentiras contra Alláh, pues Él los destruiría con un (solo) castigo, porque aquellos quienes mienten sufrirán pérdidas. Entonces ellos difirieron sobre su asunto entre ellos”[15].
Una vez que ellos difirieron, fallaron y perdieron su fuerza.
Así que esta diferencia que encontramos con algunos de nuestros hermanos quienes están (exageradamente) severos en seguir la Sunnah en este asunto y otros, yo lo veo como una contradicción a la Sunnah y a las metas de la Sharía, como la unificación de las posiciones y la unidad de la gente, desde esto, y por Alláh es la alabanza, no es algo que sea Haram ni es un Munkar, por lo tanto es algo que está basado sobre el Ijtihad. Así que para nosotros, el traer división y causar que los corazones tengan animosidad, odio y mofa para aquel quien se opone a nuestra posición, mientras ello es permisible y no está en oposición a la Sunnah, entonces es obligatorio sobre cada hombre el proteger y guardar sobre la unidad de los rangos siempre que sea posible[16].
[1] Sahih Al-Bukhari (69) y Sahih Muslim (4503).
[2] Sahih Al-Bukhari (703) y Sahih Muslim (1046).
[3] Sahih Al-Bukhari (473) y Sahih Muslim (1746).
[4] Sahih Al-Bukhari (631)
[5] Sunnan An-Nasai (1605) and Sunnan At-Tirmidi (806); Al-Albani lo declaró Sahih.
[6] El significado de Surah An-Nisa (4:115).
[7] As-Sharh Al-Mumti, 4/52-54.
[8] Sunnan An-Nasai (1605) and Sunnan At-Tirmidi (806); Al-Albani lo declaró Sahih.
[9] Sahih Al-Bukhari (732) y Sahih Muslim (920).
[12] El significado de Surah Ash-Shura (42:13).
[13] El significado de Surah Al-Anam (6:159).
[14] Sahih Muslim (971)
[15] El significado de Surah Ta-Ha (20:61-62)
[16] Ash-Sharh Al-Mumti, 4/61-63
Un hombre reza el Tarawih en su casa con su familia
Pregunta: ¿Es permitido para un hombre el rezar la oración del Tarawih (en Ramadán) con su familia en la casa?
Respuesta: No hay problema con eso, (más bien) ello es mejor como ha precedido.
Sheik Muqbil bin Hadi.
Contribuido por Sheik Muqbil bin Hadi.
Tomado de: http://www.salafisocietydc.org/index.php?option=com_content&task=view&id=35&Itemid=24
Fadaih wa Nasaih, Al-Allamah Al-Muhadith Muqbil ibn Hadi al-Wadi-i, Darul-Haramain, El Cairo. Página 86.
Traducido (del árabe al inglés) por: Abu Khadijah.
Traducido (del inglés al español) por: Musa Abdullah Reyes H.
Para: www.islam-mexico.net.
Sh. Muhammad Bazmul sobre el número legislado de Rakás de Witr
El Sheik Muhammad Bazmul
sobre el número legislado de Rakás de Witr, la Oración de la Noche (Qiyaam Al-Layl).
Pregunta: Yo entiendo
que la Qiyaam Al-Layl (la oración de la noche) tiene que tener un cierto número
de Rakás. ¿Podría usted clarificar la correcta posición sobre este asunto,
incluyendo una discusión de las diferentes opiniones de los escolares? Que Alláh
lo recompense mucho.
Respuesta, por el Sheik
Muhammad Umar Bazmul, profesor de altos estudios en la Universidad Umm Al-Quraa
en Meca.
Los
escolares ven la Qiyaam Al-Layl (la oración de la noche) para ser de los actos
opcionales de adoración, que son Muqayyad (restringidos). Y esta restricción es
que los reportes concernientes a ello muestran que ello es legislado para ser
llevado a cabo en un cierto tiempo, y también es legislado para ser llevado a
cabo en una cierta manera. Por lo tanto ellos difieren sobre el asunto: ¿Tiene
un número (determinado) de Rakás o no?
La razón
para este diferendo puede ser encontrado en el Hadith del Mensajero (Assalalahu
alayhi wa Salaam),
cuando un hombre vino a él y le preguntó acerca de la oración de la noche,
diciendo: “Oh Mensajero de Alláh ¿Cómo rezo en la noche?”. Él (Assalalahu alayhi
wa Salaam) replicó:
“La oración de la noche es
(para ser rezada) de dos en dos” .
Así que
basado en esto, algunos escolares han dicho que no hay límite para el número de
Rakás para ser rezados como oración de la noche, mientras ellos aún lo veían
para ser una forma restringida de adoración opcional.
Aquellos
quienes han dicho que este Hadith no es una prueba para la ausencia de un límite
dicen: “Porque el que pregunta solamente preguntó acerca de la oración de la
noche, y él no preguntó acerca del número de sus Rakás”. Por lo tanto, ellos
declararon que la frase usada por el mensajero (Assalalahu alayhi wa Salaam): “Matahnaa, Matahnaa” (de
dos en dos) solamente se refiere a la descripción básica de algo, y no es algo
usado para definir un número dado. Así, estos escolares dicen que este Hadith no
es una prueba para el asunto de si hay o no límite para el número de Rakás que
pueden ser rezados.
Cuando
retornamos a la Sunnah del Mensajero (Assalalahu alayhi wa Salaam), a sus acciones, encontramos que Aishah
(Radialahu anhu) ha dicho, cuando ella fue preguntada acerca de la oración de la
noche del Mensajero (Assalalahu alayhi wa Salaam): “Él no reza más de 11 Rakás en Ramadán o en otro
(mes) que en Ramadán” .
Así que
es sabido de este Hadith, un Hadith sobre el que se ha acordado (por Al-Bukhari
y Muslim) que el Witr del Mensajero (Assalalahu alayhi wa Salaam) y su oración de la noche, la cual es
referida como As-Salat Al-Layl o Qiyan Al-Layl, la cual es referida para (rezar)
en Ramadán como As-Salat At-Tarawi y algunas veces Salal Al-Qiam, era de
solamente 11 Rakás.
De
cualquier manera ha sido auténticamente declarado que (algunos de) los
Compañeros rezaban más de 11 Rakás. Algunos de ellos rezaban 21 y otros rezaban
más. Esta acción de los Compañeros (RAM) debe haber estado basada sobre una
Sunnah, desde que ello es un asunto de adoración.
Basado en
esto, yo digo que una persona tiene opciones, acerca de cómo puede rezar sus
oraciones de la noche. Si una persona quiere rezar 11 Rakás de oración de la
noche, entonces puede hacerlo. Y quienquiera que quiera rezar 21, entonces puede
hacerlo. Y quienquiera que quiera rezar más o menos que ello, entonces puede
hacerlo. Esto es desde que el Mensajero de Alláh (Assalalahu alayhi wa Salaam) aludió al acto de hacer
Witr con 3, 5 o 7 Rakás. Él dijo: “Hagan Witr con 3, 5 o 7 Rakás, pero no lo
hagan como el Maghrib” .
Y él (Assalalahu alayhi wa
Salaam) dijo:
“Lleven a cabo el Witr con
tres (Rakás), y lleven a cabo el Witr con cinco (Rakás) .
Y está auténticamente declarado, sobre la autoridad de Muawiyah, que el
Mensajero (Assalalahu alayhi wa Salaam) llevó a cabo el Witr rezando un solo Raká .
Así que entonces todas estas
opciones, si Alláh quiere, están legisladas y, así, permisible. El musulmán
puede:
(a) Llevar a cabo el Witr
rezando un solo Raká.
(b) Llevar a cabo el Witr rezando tres Rakás.
(c) Llevar a cabo el Witr rezando cinco Rakás.
(d) Llevar a cabo el Witr rezando siete Rakás.
(e) Llevar a cabo el Witr rezando nueve Rakás.
(f) Llevar a cabo el Witr rezando once Rakás.
Y 11
Rakás era lo más que rezaba el Mensajero. De cualquier forma, como ustedes
saben, la Sunnah del Mensajero (Assalalahu alayhi wa Salaam) consiste en declaraciones, acciones y
aprobaciones. La Sunnah basada en sus propias acciones es no más de 11 Rakás; de
cualquier forma, decimos: La acción de los Compañeros, cuando ellos rezaban más
de 11 Rakás muestran que existe otra (variedad de) Sunnah, tal vez fue de la
aprobada por el Mensajero, o tal vez fue de la declarada que no nos ha llegado,
desde que ellos entendieron que uno podía rezar más de 11 Rakás, y así, ellos
rezaban más de 11 Rakás.
Así que
esto hace la Sunnah de su acción de 11 Rakás. Por lo tanto, nosotros podemos
decir que la Sunnah, en general, muestra la permisibilidad de rezar más de 11
Rakás a su vez.
Así,
podemos expresar el Fiqh sobre este asunto con la siguiente frase: La cosa más
virtuosa es restringirse a uno mismo a 11 Rakás, pero si uno añade a eso,
entonces es permisible.
Añadir a
los 11 Rakás es permisible, basado sobre la aplicación general de la Sunnah, por
la vía de las acciones de los Compañeros, que Alláh esté complacido con ellos.
Esto es lo que resulta relativo al Qiyam Al-Layl.
Es
también importante hacer notar otro asunto, que la oración de la noche es una
forma opcional de adoración que es Maqayad (restringida). Aquí hay una pregunta.
¿Es permisible para un musulmán rezar algo más que la Salat Al-Layl en la noche,
justo como las oraciones opcionales en general?
La respuesta: Sí, como
oraciones generales opcionales no tienen un límite dado. Déjenme darles un
ejemplo para clarificar la diferencia entre los dos. Las oraciones Sunnah a lo
largo del día son.
(a) Dos Rakás antes del Duhr,
dos Rakás después del Duhr, dos Rakás después del Maghrib, dos Rakás después del
Isha, y dos Rakás antes del Fajr;
(b) O cuatro Rakás antes del Duhr, cuatro Rakás después del Duhr (junto con lo
anterior);
(c) O cuatro Rakás antes del Duhr, dos Rakás después del Duhr (junto con lo
anterior);
(d) O cuatro Rakás antes del Asr (junto con lo anterior)
Todo esto
está basado sobre lo que ha venido en las narraciones. Así que déjennos decirles
que un hombre ha rezado todas estas oraciones, o aún si él no las rezó y quiere
rezar algunas otras oraciones opcionales, sin intentar que sean de las Rawatib
establecidas (oraciones diarias de Sunnah), entonces decimos: Es permisible para
él hacerlos, ya sea si es de noche o durante el día.
De
cualquier forma, no se levanten, intentando rezar el Rawatib (oraciones diarias
de Sunnah), y entonces añadirlas a ellas. No, como el Rawatib (oraciones diarias
de Sunnah) tienen un límite, dado, tiempos dados y un número dado de Rakás.
Y
similarmente es la oración de la noche. Si ustedes quieren rezar algunas
oraciones generales opcionales en la noche, entonces recen tanto como quieran .
Pero si ustedes quieren rezar Salat Al-Layl, entonces deben rezar de acuerdo a
los límites legislados por el Mensajero (Assalalahu alayhi wa Salaam) relacionados con el tiempo de la
oración y su descripción. Y como tanto el número de Rakás es concerniente,
entonces, como he mencionado, alo que ha sido relatado del Mensajero (Assalalahu
alayhi wa Salaam)
basado en la generalidad de Su Sunnah, es que no hay un límite específico para
el número de Rakás.
Fuente: Esto fue traducido exclusivamente para:
http://www.bakkah.net de una grabación de casete con el conocimiento y permiso
del Sheik, archivo no. AAMB037, fechado el 1423/8/17.
Trad. al español: Musa Abdullah Reyes para http://www.islam-mexico.net
Difundir las buenas nuevas del Ramadán
Autor: Abdullah Ibn Salih Al-Fawzan.
Fuente: Ahadith As-Siyam: Ahkam wa Adab (páginas 13-15).
Traducido por: Musa Abdullah Reyes para http://www.islam-mexico.net
Abu Huraira reportó que el Mensajero de Alláh (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo: “EL Ramadán ha venido a ustedes, un mes bendito. Alláh ha hecho sobre ustedes su ayuno. En él, las puertas del cielo están abiertas, las puertas del infierno están cerradas y los malvados demonios están encadenados. A Alláh le pertenece una noche en ello, la cual es mejor que mil meses. Quienquiera que es prevenido de su bien, entonces él ha estado privado”[1].
Este hadith es una feliz noticia para los rectos sirvientes de Alláh, de la venida del mes bendito de Ramadán. El Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) informó a sus Compañeros de su venida y ello no era solamente una simple tanda de noticias. Además, su intento fue darles a ellos las felices noticias de un tiempo magnificente del año, para que la gente recta quienes son rápidos en actuar pueda darle su debida estimación. Esto es porque el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) explicó en ello (el Hadith) que Alláh ha preparado para Sus sirvientes de las vías hacia ganar el perdón y Su contento, y hay muchas maneras. Así que quienquiera que tiene el perdón de él durante el mes de Ramadán, entonces él ha sido privado con la más alta privación.
De los más grandes favores y generosidades que Alláh ha conferido sobre Sus sirvientes es que Él ha preparado para sus ocasiones meritorias para que ellas puedan ser de provecho para aquellos quienes Lo obedecen y una carrera para aquellos quienes se apresuran para competir (por buenos hechos). Estas ocasiones meritorias son tiempos para cumplir las esperanzas por esforzarse en la obediencia y el resarcimiento de faltas y deficiencias por la auto rectificación y arrepentimiento. No hay una sola ocasión de estos tiempos virtuosos, excepto que Alláh ha asignado en ello trabajos de obediencia, por los cuales uno puede acercarse a Él. Y Alláh posee las más bellas cosas como regalos, los cuales Él confiere sobre quienquiera que Él desea por Su Gracia y Misericordia.
Así que aquel quien logra la verdadera felicidad es aquel quien toma ventaja de estos virtuosos meses, días y horas y se acerca a Su Guardián en ellos, al hacer lo que es prescrito en ellos de los actos de obediencia.
Así, tal vez, él será mostrado con una de las muchas bendiciones de aquellas ocasiones y ser ayudado por ello, con una asistencia que lo salva del Fuego y lo que contiene, tal como su ardiente calor.[2]
Ser capaz de alcanzar el Ramadán es una generosidad magnificente en sí misma, conferida sobre aquel quien lo alcanza y se levanta para esta ocasión, al pararse en oración durante su noche y ayunando durante su día. En ello, él retorna a Su Protector, (deja) de desobedecerlo a Él para obedecerlo a Él, (deja) de ser negligente con Él para recordarlo a Él, (deja) de permanecer distante de Él para volverse hacia Él en arrepentimiento sumiso.
Un musulmán debe estar consiente de esta generosidad y reconocer su magnitud. Porque efectivamente, mucha gente es prevenida de ayunar, aún porque ellos se mueran antes de lograrlo, o porque ellos no sean capaces de observarlo o porque ellos se opongan y se alejen de ello. Así, aquel quien ayuna debe dar alabanzas a su Señor por esta generosidad y debería dar la bienvenida a este mes con alegría y deleite que un tiempo magnificente del año fuera de todas las ocasiones para llevar a cabo la obediencia es bienvenido. Él debería esforzarse a sí mismo profundamente en hacer buenos actos. Y debería invocar a Alláh para garantizar su ayuno t el estar parado en la oración de la noche y que Él le provea con seriedad, entusiasmo, fuerza y energía en ese mes. Y que Él lo despierte del sueño descuidado para que pueda tomar ventaja de estos virtuosos tiempos de bien.
Es desafortunado encontrar que mucha gente no conoce el valor de esta virtuosa ocasión, ni consideran que sea sagrado. Así que el mes de Ramadán no se vuelve más un tiempo significativo para la obediencia, la adoración, recitar el Corán, dar caridad y hacer recordatorio de Alláh. Además, para alguna gente, se vuelve un tiempo significativo para diversificar sus comidas y bebidas y para preparar diferentes tipos de platillos antes de que el mes comience. Alguna otra gente no sabe del Ramadán, excepto como un mes de somnolencia y constantes y recurrentes reuniones mientras se duerme por el día. Esto es para el punto que algunos de entre ellos duermen hasta pasado el tiempo de las oraciones obligatorias; así, no rezándolas en congregación o en sus propios tiempos. Otra gente no conoce el Ramadán, excepto como un tiempo significativo para conducir asuntos mundanos, no como un tiempo significativo para conducir asuntos para el Más Allá. Así ellos trabajan afanosamente en ello, comprando y vendiendo, y ellos se quedan en las áreas de compras, consecuentemente abandonando los Masyids. Y cuando ellos rezan con la gente, lo hacen en una forma apresurada. Esto es porque ellos encuentran su placer en los lugares de compras. Este es el alcance que las nociones y puntos de vista (del Ramadán) han sido cambiados. Algunos de los Salaf acostumbran decir: “Efectivamente Alláh, el Más Alto, ha hecho el mes de Ramadán como una competencia para sus criaturas, en el cual ellos pueden competir con otro para Su placer, al obedecerlo. Así, un grupo viene primero y así es que prosperan y otro grupo viene al último y así es que fallan”.[3]
También, el individuo no sabe si este es quizá el último Ramadán que verá en su vida, si él la completa. Cuántos hombres, mujeres y niños han ayunado con nosotros el año pasado, y ahora yacen enterrados en las profundidades de la tierra, dependiendo de sus buenos actos. Y ellos esperaban ayunar muchos más Ramadanes. De forma similar, todos nosotros deberíamos seguir su vía. Por lo tanto, es sobre el musulmán el alegrarse de esta ocasión magnificente para la obediencia. Y no debería renunciar a ello, sino en su lugar ocuparse a sí mismo con lo que lo beneficiará y lo que le causará su efecto para quedarse. Para qué más es ello, excepto los días numerados, los cuales son ayunados en sucesión y los cuales terminan rápidamente.
Que Alláh nos haga, tanto como a ustedes, de entre aquellos quienes están más avanzados en mantenerse en los buenos hechos.
[1] Este Hadith es reportado por Ahmad y An-Nasai. Ver la revisión de Ahmad Shakir del musnad (no.7180) y Sahih At-Targhib wa Tarhib de Al-Albani (1490), tanto como Tamam-ul-Manah 3.
[2] Estas son las palabras de Ibn Rajab Lataa if-ul-Maarif, página 8.
[3] Lataa if-ul-Maarif de Ibn Rajab, página 246.
Los últimos diez días del Ramadán
Sheik Abdullah Ibn Salih Al Fawzan[1].
Tomado de: http://www.troid.org
Traducido por: Musa Abdullah Reyes.
Aishah (RAA) dijo: “Cuando los últimos diez días (del Ramadán) venían, el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) pasaba su noche en adoración, despertaba a su familia (en la noche), es esforzaba por sí mismo y apretaba su Izaar (chaleco)”[2].
Este hadith es prueba que los últimos diez días de Ramadán tienen una virtud especial sobre otros (días), en los cuales uno debería incrementar en obediencia y actos de adoración, tales como la adoración, hacer dhikr (remembranza) y recitar el Corán).
Aishah (RAA) ha descrito a nuestro Profeta y modelo de rol (a seguir), Muhammad (Assalalahu alayhi wa Salaam) con cuatro atributos:
1.- Él (Assalalahu alayhi wa Salaam) “pasaba su noche en adoración”, significando que él no dormía durante ella. Así, él (Assalalahu alayhi wa Salaam) se quedaba despierto a lo largo de ella en adoración y él animaba su alma por pasar la noche en insomnio. Esto es desde que el dormir es hermano de la muerte. El significado de “pasaba su noche” es que él (Assalalahu alayhi wa Salaam) pasaba toda la noche en el estado de Qiyam (oración nocturna) y llevando a cabo actos de adoración que son hechos por Alláh, el Señor de los mundos. Nosotros debemos recordar que los últimos diez días de Ramadán están mezclados y numerados.
Como lo que ha sido reportado concerniente a la prohibición de pasar la noche entera en oración, lo cual ha sido mencionado en el hadith de Abdullah Ibn Amar (Radialahu anhu), entonces esto es con respecto a alguien quien hace eso consistentemente a lo largo de cada noche del año.
2.- Él (Assalalahu alayhi wa Salaam) “despertaba a su familia” significando sus esposas puras, las Madres de los Creyentes, así que ellas pueden tomar parte en el provecho del bien, el dhikr (remembranza) y los actos de adoración durante estos tiempos benditos.
3.- Él (Assalalahu alayhi wa Salaam) “se esforzaba”, significando que él (Assalalahu alayhi wa Salaam) perseveraba y se esforzaba en la adoración, añadiendo más (actos) a sus actos que había hecho en los primeros veinte días (de Ramadán). Él (Assalalahu alayhi wa Salaam) solamente hacía esto porque la noche del Qadr ocurre durante uno de estos (últimos diez) días.
4.- Él (Assalalahu alayhi wa Salaam) “apretaba su Izaar” (chaleco), significando que él se esforzaba a sí mismo y luchaba intensamente en la adoración. También es dicho que ello significa que él (Assalalahu alayhi wa Salaam) se apartaba de las mujeres. Esto parece ser lo más correcto desde que ello se inclina con lo que ha sido mencionado previamente y con el hadith de Anas (Radialahu anhu): “Él (Assalalahu alayhi wa Salaam) se deslizaba fuera de su cama y se apartaba de las mujeres (sus esposas)”[3].
También, él (Assalalahu alayhi wa Salaam) observaba el Itikaf en los últimos diez días del Ramadán y la persona quien está en estado de Itikaf está restringida de interactuar (sexualmente) con mujeres.
¡Oh hermanos musulmanes! Esfuércense para caracterizarse a ustedes mismos con estos atributos. Y guarden la oración que hacen en lo profundo de la noche (Tahayud) con el Imám en adición a la oración del Tarawi (la cual es rezada en las primeras partes de la noche), para que su esfuerzo en estos últimos diez días pueda ir más allá que el de los primeros veinte. Y así para que ustedes puedan lograr el atributo de “pasar la noche en adoración” (por permanecer) orando.
Y ustedes deben ser pacientes en su obediencia a Alláh, porque efectivamente, la oración del Tahayud (noche) es difícil pero su recompensa es grande. Por Alláh, ello es una gran oportunidad en la vida de uno y una cosa provechosa de la cual tomar ventaja, para aquel a quien Alláh le garantiza ello. Y una persona no sabe si quizá él encontrará una de las muchas recompensas de Alláh durante la oración de la noche, así sirviendo como asistencia para él en este mundo y en el Más Allá.
Los correctos predecesores de esta Ummah alargaban la oración en la noche, esforzándose a sí mismos. As-Saib Ibn Yazid dijo: “Umar Ibn Al-Khatab ordenó a Ubay Bin Kaab y a Tamiz Ad-Dari el liderar a la gente en la oración con once Rakás. El recitador recitaba cien versos, hasta el punto que nosotros teníamos que inclinarnos sobre un báculo de madera debido a la larga estadía (de pie). Y nosotros no nos deteníamos hasta las primeras partes del Fajr”[4].
Abdullah Ibn Abi Bakr reportó: Escuché a mi padre (Abu Bakr) decir: “Durante el Ramadán, nosotros terminábamos (la oración de la noche) tarde y apurábamos a los sirvientes a presentar la comida (del Suhur) por temor de que el Fajr (la mañana) viniera sobre nosotros”[5].
Estos son dos esfuerzos del alma que el creyente encara durante el Ramadán: el esfuerzo por el día con el ayuno y el esfuerzo por la noche con el Qiyam (la oración de la noche). Así que quienquiera que combina estos dos y cumple sus derechos, entonces está entre los pacientes, “aquellos a quienes les será dada su recompensa en lo total, sin ningún recuento”[6].
Estos diez días son la última parte del mes y las acciones de una persona están basadas sobre éstos. Así que tal vez, él encontrará la noche del Al-Qadr, mientras se levanta en oración para Alláh y así tendrá perdonados todos sus pecados pasados.
Y uno debe incitar, animar y persuadir a su familia a llevar a cabo actos de adoración, especialmente en estos grandes tiempos en los cuales nadie es negligente, a menos que haya sido privado. Lo que es más increíble que esto es que mientras la gente está llevando a cabo la oración y haciendo Tahayud, algunos individuos gastan su tiempo en reuniones prohibidas y eventos pecaminosos. Esto es, efectivamente, la gran pérdida. Nosotros pedimos a Alláh por su protección.
Por lo tanto, embarcarse en estos últimos días significa entrar en el beneficio de hechos piadosos en lo que quedadle mes. De los asuntos desafortunados es ver que alguna gente se excede en actos piadosos, tales como la oración y la recitación del Corán, en la primera parte del mes, pero entonces signos de fatiga y aburrimiento comienzan a mostrarse más tarde, especialmente cuando vienen los últimos diez días de Ramadán. Y esto es en rencor de que aquellos últimos diez días poseen una elevación más grande que los primeros. Así. Uno debe perseverar en procurar y esforzarse e incrementar su adoración, cuando el final del mes se acerca. Y nosotros debemos tener en mente que las acciones de una persona están basadas en esto último.
[1] Lo siguiente es tomado de “Ahadithus Siyam: Akham wa Aadaab (páginas 133-135).
[2] Al-Bukhari (4/269) y Muslim (1174).
[3] Ver Lataif ul-Maraif, página 219.
[4] Ver “Al-Muwata (Dar el Fikr); versión inglesa, vol. 1, página 154.
[5] También en el Muwata de Imám Malik, volumen 1, página 156.
[6] Surat us-Zumar: 15.
Pregunta: Por algunas circunstancias personales nos mudamos a Pakistán, donde muchas cosas son diferentes, tales como el tiempo de la oración, etc. yo quiero preguntarles: yo tengo la intención de ayunar en el día de Arafah, pero la fecha Hijri en Pakistán es diferente de la fecha en Arabia Saudita: cuando la fecha en Pakistán es el 8 del mes, es el 9 en Arabia Saudita. ¿Debería ayunar en el 8, el cual es el 9 en Arabia Saudita, o debería ayunar de acuerdo a la fecha en Pakistán?
Respuesta: Alabado sea Alláh. El Sheik Ibn Uthaymin (que Alláh tenga misericordia de él) fue preguntado: ¿Qué si el día de Arafah es diferente por que la luna sea vista en diferentes tiempos en diferentes países? ¿Deberíamos ayunar de acuerdo a la vista de la luna en el país donde estemos o de acuerdo a la vista de luna en al-Haramayn (los dos Sagrados Santuarios)?
Él replicó: esto está basado en una diferencia de opinión entre los escolares: ¿Hay solamente una vista de la luna para todo el mundo o varía de acuerdo a cuando la luna se eleva en diferentes lugares?
El punto de vista correcto es que varía de acuerdo a cuando la luna se eleva en diferentes lugares. Por ejemplo, si la luna es vista en Mekkah, y hoy es el noveno (día), y es vista en cualquier otro lugar un día antes que en Mekkah, y el día de Arafah en Mekkah es el décimo para ellos, entonces no es permisible para ellos ayunar en este día porque es Eid. De manera similar, si sucede que ellos vieron la luna después de Mekkah, y el noveno (día) en Mekkah es el octavo (día) para ellos, entonces deberían ayunar en el día que es el noveno para ellos, el cual es el décimo en Mekkah. Este es el punto de vista correcto, porque el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo: “Cuando ustedes la vean (la luna nueva) ayunen y cuando ustedes la vean (de nuevo) rompan su ayuno”. Aquellos quienes no vieron la luna en su propia localidad no la han visto. Justo como la gente unánimemente de acuerdo que los tiempos para el amanecer y la puerta del sol varían de acuerdo a su propia localidad, así que también los meses son trabajados por localidad, justo como la hora diaria.
Majmu al-Fatawa, 20.
Y él (que Alláh tenga misericordia de él) fue preguntado acerca de alguna gente quien trabaja en la Embajada de Arabia Saudita en un país extranjero, quien dijo que estaban teniendo un problema concerniente al ayuno del Ramadán y el ayuno en el día de Arafah. Los hermanos ahí se han dividido en tres grupos:
Un grupo dijo: nosotros ayunaremos con Arabia Saudita y romperemos el ayuno con Arabia Saudita.
Otro grupo: nosotros ayunaremos con el país donde estamos viviendo y romperemos en ayuno con ellos.
El último grupo dijo: nosotros ayunaremos el Ramadán con el país donde estamos viviendo, pero ayunaremos el día de Arafah con Arabia Saudita.
Ellos preguntaron al Sheik que les proveyera una respuesta detallada concerniente al ayuno del Ramadán y el ayuno del día de Arafah, mientras hacían notar que en los pasados cinco años, en el país donde estaban viviendo ni el Ramadán ni el día de Arafah han sido observados n los mismos días que en Arabia Saudita; su Ramadán comenzó uno o dos días después de que había sido anunciado en Arabia Saudita, y en algunos casos tres días después.
Él replicó: En el nombre de Alláh, el Más Glorioso, el Más Misericordioso.
Los escolares (que Alláh tenga misericordia de ellos) difirieron con respecto al asunto cuando la luna es vista en una parte del mundo musulmán y no en otra: ¿Todos los musulmanes tienen que actuar sobre la base de ello, o solamente aquellos quienes la vieron y la gente que vive bajo el mismo gobierno? Hay muchos puntos de vista diferentes
El punto de vista más correcto es que el asunto debería ser referido a aquellos quienes tienen conocimiento de ello. Si la luna se eleva al mismo punto para dos países ellos se vuelven como un solo país, así que si es vista en uno de ellos esa regla se aplica al otro. Pero si los puntos de elevación difieren entonces cada país tiene sus propias reglas. Este es el punto de vista favorecido por el Sheik al-Islam Ibn Taymiyah (que Alláh tenga misericordia sobre él); este es el aparente significado de los textos del Corán y la Sunnah que son implicados por analogía:
En el Corán se dice (interpretación del significado):
“Así que quienquiera de ustedes que vea (el creciente de la primera noche de) el mes (de Ramadán en su casa), debe observar el Sawm (ayuno) ese mes, y quienquiera que esté enfermo o de viaje, el mismo número (de días los cuales no observó el Sawm, deben ser hecho) de otros días. Alláh quiere para ustedes lo fácil y no quiere hacer las cosas difíciles para ustedes. (Él quiere que ustedes) completen el mismo número (de días), y que ustedes deban magnificar a Alláh (decir Takbir [Alláhu Akbar = Alláh es el Más Grande]) por haber sido ustedes los que han sido agraciados por Él” (Al-Baqarah 2:185).
Lo que está implicado por este verso es que quienquiera que no la vea no está obligado a ayunar.
En la Sunnah, el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo: “Cuando ustedes la vean (la luna nueva) ayunen y cuando ustedes la vean (de nuevo) rompan su ayuno”. Lo que está implicado en este Hadith es que si nosotros no la vemos no estamos obligados a ayunar o a romper el ayuno.
Con respecto a la analogía, los tiempos para comenzar o terminar el ayuno cada día deberían ser trabajados en cada país por sí mismo, de acuerdo a los tiempos locales de amanecer y de puesta del sol. Este es un punto sobre el cual está el consenso de los escolares. Así que si ustedes ven a la gente en Asia oriental comenzar su ayuno antes que la gente de Asia occidental, o romper su ayuno antes que ellos, es porque el amanecer rompe para los anteriores antes que para los posteriores, y el sol sale para los anteriores antes que para los posteriores.
Una vez que esto está declarado con respecto a los tiempos para comenzar y terminar el ayuno diario, ello también se aplica al comienzo y fin del ayuno mensual. No hay diferencia entre ellos.
Pero si muchas regiones están bajo el mismo gobierno, y el gobernante da la orden para que el ayuno comience o termine, entonces esta orden del gobernante resuelve esa disputa.
Basados en lo anterior, ustedes deberían ayunar y romper su ayuno junto con la gente del país donde están viviendo; no importa si es que ello está de acuerdo con su país de origen o no. Similarmente en el día de Arafah ustedes deberían seguir al país donde estén viviendo.
Escrito por: Muhammad al-Salih al-Uthaymin, 28/8/1420 H.
Majmu al-Fatawa, 19.
Trad. al español: Musa Abdullah Reyes para http://www.islam-mexico.net
Pregunta: …él dio un fatwa que el Yumuah y la oración del Zuhr son “dejadas” (no obligatorias) si uno atendió la oración del Eid si ello es el Imám o (cualquiera de) la congregación…
Respuesta: Si el Eid coincide con el viernes, entonces atiendan a la oración del Yumuah para aquél quien atender la oración del Eid es “dejado” (no obligatorio) excepto para el Imám. Por cierto, él no está relevado de su obligación excepto si la gente no se reúne para (la oración del) Yumuah.
Y con Alláh yacen todos los éxitos y que Alláh envíe oraciones y salutaciones sobre nuestro Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) y su familia y sus compañeros.
El Comité Permanente para la Investigación Islámica y Fatwa.
Jefe: Sheik Abdul Aziz Abdullah Ibn Baz;
Diputado en Jefe: Sheik Abdur Razaq Afifi;
Miembro: Sheik Abdullah Inb Qu-ud.
Fatwa al-Lajnah ad-Daa. Imah lil-Buhooth al-Ilmiyyah wal-Iftaa. Volumen 8, página 179, Fatwa No. 2140.
Trad. al español: Mussa Abdullah Reyes para http://www.islam-mexico.net
Pregunta:
¿Es un deber que solo haya una oración de Eid en una ciudad? Quiero decir, por esta pregunta, una ciudad típica en el Oeste tiene solamente un Masjid o Centro Salafi, y todos los musulmanes de la ciudad se reúnen en un lugar para la oración de Eid, un lugar que usualmente tiene apartados de propaganda varios Yamaas y sus libros y cintas son vendidos ahí. El Khatib no es Salafi y hay muchas perversiones antes y después de la oración, tales como mujeres desplegando abiertamente su belleza, toma de fotografías y en algunas ocasiones puede haber música en la musala después de la oración y otras cosas. Los Salafis quieren ponerse fuera de todo estas perversiones. Así que si ellos quieren establecer otro lugar para rezar el Eid, para que su Eid esté libre de tales Bidah (innovaciones) y abiertos actos de desobediencia, ¿Ellos serían considerados como una escisión del Yamaa por hacer esto?
Respuesta: por el Sheik Rabi ibn Hadi Al-Madkhali, bien conocido escolar y profesor retirado de la Universidad de Al-Madina.
Por Alláh, los Salafis deben advertir a esta gente, la gente de esa Masjid (aquellos que establecen la oración de Eid). Ellos deben advertirles y decirles:
“La reunión de los musulmanes debe ser para aprender acerca de buenas cosas, para aprender acerca de la Religión, para aprender acerca del Tawhid. No debe ser usado para aprender como difundir perversidades, falsas ideologías o actividades desviadas.
Nosotros no queremos escindir la unidad de los musulmanes, y nos gustaría orar con ellos, pero si ellos están yendo a actuar de esta forma, permitir que tengan lugar estas perversidades, permitir la innovación, desvío e inmundos actos de desobediencia, entonces estamos excusados (de tal reunión). Si somos capaces, estableceremos otro lugar para rezar”.
Esto es porque esta perversión es una excusa válida, una excusa para los musulmanes de no atender tal reunión. Si un musulmán está llamado a atender y atestiguar alguna reunión perversa, entonces él tiene una excusa para alejarse. De cualquier manera, si él es capaz de cambiar este mal, entonces él atiende y cambia el mal. Pero si él no es capaz de cambiar el mal, entonces que no lo atienda.
Alláh dice:
“Y aquellos quienes no atestiguan el Zoor”[1].
Zoor es la falsedad. Esta es de las características de los creyentes, los adoradores de Ar-Rahman que ellos no atestiguan la falsedad. Así que entonces, si existe lo que tú has mencionado de innovación, desobediencia, toma de fotografías y otras cosas, entonces esto, por Alláh, es la clase más severa de falsedad.
Las oraciones de Eid no son para estar combinados con esta clase de intenciones perversas, además la gente está para ser unida por elevadas y nobles metas, para enseñar a la gente cosas buenas, como el Aqida, lo Halal y lo Haram, etc. Ellos no deben juntarse para enseñar perversión, desobediencia y falsas creencias.
Así, por lo tanto ellos deben advertirles y hacerles claro: “Ustedes están haciendo tal y tal cosa mala, y somos perjudicados por estas clases de cosas, y así, no somos capaces de cooperar contigo en difundir esta perversión y corrupción. Así que deben detener esto y tomar el curso apropiado de acuerdo al Islam o no podemos juntarnos con ustedes. Especialmente desde que ustedes están en el occidente donde la gente está necesitada del Islam. Los no musulmanes están necesitados de la presentación propia (adecuada) del Islam, justo como los musulmanes están debido a su extravío, desde que ellos son tan ignorantes acerca de la propia imagen del Islam y las correctas creencias y metodología.
Si ellos toman esta advertencia y están listos para remover estas perversiones, entonces la alabanza es para Alláh. Pero si ellos continúan es su falsedad, entonces está sobre los Salafis el establecer su propia musala, orar en ella y presentar la imagen propia del Islam con el correcto Aqida y Mahaj.
Pedimos a Alláh que una a los musulmanes sobre la Declaración de la Verdad, sobre el Libro de Alláh y la Sunnah del Mensajero de Alláh (Assalalahu alayhi wa Salaam) y que los mantenga a salvo de los llamadores a la perversión y de los llamadores a la fitna y sus males. Verdaderamente Alláh es el que escucha las súplicas.
Fuente: Esto fue traducido exclusivamente para http://www.bakkah.net de una grabación de casete con el conocimiento y permiso del Sheik, Archivo número AARM007, fechado en el 1423/9/3.
Trad. al español: Musa Abdullah Reyes para http://www.islam-mexico.net
EN ELNOMBRE DE ALLAH (DIOS), CLEMENTE Y MISERICORDIOSO
PREFACIO
Alabado sea Allah señor del Universo y la paz y las bendiciones de Allah sean con él más noble de Sus Profetas y Mensajeros, Muhammad.
Allah ¡Altísimo sea!, dijo:
“En el mes de Ramadán se hizo descender el Corán, dirección para los hombres y pruebas claras de la Guía y del Discernimiento; así pues, quien de vosotros vea el mes, que ayune…”
El Profeta Muhammad dijo:
“El Islam ha sido edificado sobre cinco pilares: Atestiguo que no hay dios más que Allah y que Muhammad es mensajero de Allah, Cumplir con las oraciones, Pagar el zakat, ayunar el mes de ramadán y hacer la peregrinación.”
Hermano musulmán:
En pocos días más comenzaremos a ayunar el mes de ramadán. En él, las puertas del paraíso se abren y las del infierno se cierran. Es el mes de la adoración y obediencia a Allah. Es el mes del Corán, de la generosidad y de oraciones por la noche.
Para saber más de este mes, sobre sus reglas y virtudes, el Centro Cultural Islámico “Custodio de las dos sagradas mezquitas”, Rey Fahd, en Buenos Aires, ha preparado este simple opúsculo.
El Sheij, Imam de la mezquita ¡que Allah le otorgue éxito! Se esforzó para recopilar el material de los libros de Fiqh y presentarlo de un modo adecuado al nivel común de los musulmanes en La República Argentina.
Roguemos a Allah para llegar con vida a este bendito mes y para que nos ayude a cumplir con el ayuno. Y para que este libro sea útil para los que lo leen. Y que nuestras obras sean siempre por y para Allah.
Dr. Nassr Ibrahim Al Tuwaim.
Director del Centro
INTRODUCCION
Alabado sea Allah (El Dios), Grandioso, Misericordioso y Dador por excelencia. Allah (El Dios) es Poderoso, Fortísimo y Rey. Es Benevolente, Generoso, Clemente y Misericordioso.
Allah es merecedor de las más sublimes alabanzas, por sus bellas y magníficas características, Y debemos agradecerle enormemente, por sus mercedes otorgadas a nosotros.
Agradecerle constituye más bendiciones que nos serán derramadas.
Atestiguo que no hay mas dios que Allah, Único, no tiene socio alguno y es Soberano. Atestiguo que Muhammad es Su siervo y Mensajero, fue enviado a los genios y humanos.
¡Allah Nuestro!, Bendiga a Muhammad, a su familia, a sus compañeros y a todos los que siguen su camino hasta el Día de la Resurrección.
Este es un opúsculo sencillo relacionado con el ayuno del mes de Ramadán.
En él, el lector encontrará lo suficiente para saber algo sobre el mes sagrado musulmán. ¿Qué es el ayuno?, ¿Cuáles son los méritos del mismo?, ¿Quiénes son los que ayunan?, etc.
Esperamos que este opúsculo sirva para aprender más sobre el Islam.
Méritos del Ayuno
Un bendito mes se aproxima y asimismo benditos días donde Allah multiplica Sus recompensas y derrama sus mercedes.
Dios abre Sus puertas a todos, para hacer el bien. Es un mes de bondades, de recompensas y de mercedes.
Es el mes de Ramadán en que ha sido revelado el Corán, guía de la gente y evidencia de la verdad pura.
Es un mes que, sus primeros diez días son Clemencia, los siguientes a éstos, son Perdón divino, mientras que los últimos diez días son Liberación del Fuego Infernal.
En los dos Sahih, Abu Hurairah (Radialahu anhu) dijo que el Profeta Muhammad (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“Con la llegada de Ramadán, las puertas del Paraíso se abren y las del Infierno se cierran y los demonios son encadenados.”
Las Puertas del Paraíso se abren, porque son muchas las buenas obras que se desarrollan en este mes y las del Infierno se cierran por la escasez de pecados cometidos por los virtuosos y los demonios se amarran, es decir que no son capaces de realizar lo que habitualmente hacen fuera de Ramadán.
En otro contexto, el Profeta Muhammad dijo:
“Sabed que el mal aliento del ayunante es más aromático ante Allah que el perfume del almizcle.”
Al estar el estómago vacío, se cambia el olor del aliento del ayunante, este “mal olor” en cuanto a la gente, es para Dios más dulce que el agradable olor del almizcle, porque es la consecuencia de la adoración.
Las Hasanat en Ramadán se multiplican enormemente.
El Mensajero de Dios (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“Cada buena obra que un hijo de Adán realiza, se le multiplica hasta diez veces y también hasta llegar a setecientas veces. Allah dijo salvo el ayuno es para Mí y Yo lo recompesaré por ello.”
Esto implica que la multiplicación, en este caso, es innumerable.
El mes de Ramadán es el mes del perdón.
En los dos Sahih, Abu Huraira (Que Dios esté complacido con él) relató que el Profeta Muhammad (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“El musulmán que ayuna el mes de Ramadán por y para Dios, le serán borrados sus pecados.”
El ayunante experimenta el goce dos veces: La primera vez al terminar su día de ayuno y quedar complacido, y otra vez más, al encontrarse con Allah.
¿Cómo se confirma el mes de Ramadán?
La llegada del mes de Ramadán se verifica a través de dos formas:
En Primer lugar, a través de la visión de la nueva luna. Al respecto, Allah dijo:
“Quien de vosotros vea la luna, pues que ayune.”
Y también, el Profeta Muhammad (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“Al ver la nueva luna, hay que comenzar a ayunar.”
No es necesario que cada musulmán vea la luna, sino basta que un musulmán confiable la haya visto para empezar el ayuno.
En segundo lugar: Completar el mes de Shaban.
Es sabido que el mes lunar no pasa de treinta días, tampoco es menos de veintinueve días. Por ello, el Profeta Muhammad (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“Comenzad vuestro ayuno con la nueva luna y dejad de hacerlo una vez que aparezca la otra nueva luna. Si dudáis, entonces continuad ayunando a lo largo de treinta días. (Transmitido por Muslim).
¿Qué es el ayuno?
Es la abstinencia total de ingerir comida, bebida y tener relaciones maritales, durante los días del mes de Ramadán, desde el alba hasta el ocaso
Allah dijo:
“Y comed y bebed hasta que se distinga el hilo blanco del hilo negro que es el alba. Luego completad el ayuno hasta la noche.”
La posición que ocupa Ramadán en el Islam
Ramadán es uno de los pilares del Islam. Allah dijo:
¡Creyentes!,se os ha prescrito el ayuno como lo ha sido prescrito para las naciones anteriores, quizás cuidéis, así, la ley de Allah. Son días contados…”
Y también dijo:
“En el mes de Ramadán ha sido revelado el Corán, como guía a la gente y clara evidencia de la verdad pura, quien de vosotros sepa de la llegada del mes, pues que ayune.”
El Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“El Islam ha sido construido sobre cinco pilares: El testimonio de la fe consiste en: No hay dios más que Allah y Muhammad es Mensajero de Allah. La realización de las Oraciones, el pago del Zakat, el ayuno de Ramadán y la Peregrinación.”
Es menester señalar que el ayuno de Ramadán fue ordenado realizarlo, el día lunes del mes de Shaban, en el segundo año de la Hégira. Y el Mensajero de Dios ayunó a lo largo de nueve años, es decir todos los años que vivió tras la orden divina relacionada con el ayuno de Ramadán.
Condiciones del Ayuno
Para ayunar, en primer lugar, uno tiene que ser musulmán, sano física y mentalmente y que haya llegado a la pubertad.
El Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“Tres clases de personas son eximidas de toda responsabilidad religiosa: El demente hasta que se sane, el dormido hasta que despierte y el niño hasta llegar a la pubertad.” (Transmitido por: Abu Daud y otros).
Para que el ayuno de la mujer sea correcto –según el Islam- debe ser realizado fuera del periodo menstrual y fuera del periodo después del parto.
El Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“…Si se encuentra en la menstruación –la mujer- no reza ni ayuna.” (Transmitido por Al Bujarí).
Elementos que anulan el Ayuno
1.-Tener relaciones maritales.
Implica tener relaciones sexuales, en cualquier momento entre el alba hasta y el ocaso, esto es lo más grave y condenado. El ayunante, al tener relaciones maritales, rompe de inmediato su ayuno, fuese este obligatorio o voluntario. Si esto llegara a suceder durante las horas del ayuno, el musulmán tiene que pagar por esto; es decir tiene que liberar a un esclavo musulmán, si no puede, pues que ayune dos veces seguidos sin romper nunca su ayuno, a menos que exista días en que el ayuno es prohibido, como son los dos días del: Eid, o si el musulmán se enferma. Si no puede cumplir con el ayuno de sesenta días, pues que alimente a sesenta pobres. Para cada pobre 510 gramos de un buen trigo y si no hay trigo, puede hacerlo con arroz, teniendo en cuenta las medidas.
2.-Salida de semen.
La salida de semen, producto de contacto, beso o masturbación, entre otros modos, anula de inmediato el ayuno. Porque esto es uno de los placeres y éxtasis y tanto el placer como el éxtasis deben ser dejados de lado, en los días de Ramadán, por y para Allah.
En el Hadiz Al Qudsi, Allah, refiriéndose al ayunador, dijo:
“…deja de comer, de beber y se abstiene de los placeres por y para Mí.” (Transmitido por Al Bujarí).
En cuanto a la eyaculación nocturna o tal vez, la salida de semen como consecuencia de pensamiento y nada más que pensamiento; esto no anula el ayuno, porque la eyaculación nocturna no está en manos del ayunante y el pensamiento es perdonado.
Con respecto a este último, el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“Allah ha perdonado a la gente de mi nación el pensamiento impuro que nunca llega a ser llevado a la práctica.”
3.-Comer y beber.
Llevar comida o bebida, sea lo que sea su procedencia, a la boca o nariz, anula tajantemente el ayuno.
Allah dice:
“Comed y bebed hasta que se distinga un hilo blanco de un hilo negro, o sea hasta la aurora, luego completad el ayuno hasta la noche.”
4.-Todo lo que reemplaza lo que es comida y bebida.
Son dos elementos:
La transfusión de sangre porque todo alimento es convertido en sangre, dentro de la persona, y de este modo, el cuerpo se alimenta. Por ello anula el ayuno.
Las inyecciones alimenticias porque beneficia al cuerpo. Pero, en cuanto a las otras inyecciones, sea a través de las venas o no, sin duda alguna no afecta el ayuno del musulmán.
Sacar sangre dañina del cuerpo a través de ciertos cortes, en el mismo, con el objetivo de sanarse, conocido en árabe como: Alhiyamah, esto anula el ayuno.
Al respecto, el Profeta dijo:
“El ayuno del Hayim y del Mahyum es nulo.”
5.-Vomitar voluntariamente.
Sacar lo que el estómago contiene, vía bucal anula el ayuno.
El Profeta dijo:
“Quien vomita sin querer, su ayuno es lícito y quien lo hace intencionalmente, su ayuno es rechazado.”
6.-La menstruación y la sangre tras el parto.
Tanto la sangre de la menstruación como la del parto anulan el ayuno.
El Profeta dijo:
“La mujer durante la menstruación no reza ni tampoco ayuna.”
La mujer, al comenzar su menstruación, su ayuno pasa a ser nulo, sea esta menstruación en el comienzo del día, al final del mismo o poco antes del ocaso.
Todos estos elementos que anulan el ayuno –salvo lo de menstruación y lo del parto- para que anulen realmente el ayuno, tienen que poseer tres requisitos:
1.-Que el musulmán actúa a sabiendas.
El musulmán que ignore la regla, como por ejemplo: Come sin saber que ya pasó la hora de Fayr, de todas maneras, su ayuno es correcto.
2.-Que el ayunante esté consciente.
Si se le olvida y actúa en este estado, de igual manera, su ayuno es lícito.
Al respecto, el Profeta dijo:
“El musulmán que por olvido y estando ayunando come o bebe, pues que siga ayunando, porque Allah le dio de comer y le dio de beber.”
3.-Que actúe por voluntad propia.
El musulmán que es obligado a anular su ayuno en contra de su voluntad, de igual modo, su ayuno es correcto.
El Profeta dijo:
“Allah ha perdonado a la gente de mi nación, la equivocación, el olvido y los que ellos cometen en contra de su voluntad.” (Transmitido por: Ibn Mayah y Al Baihaquí).
Reglas del Ayuno
1.-El ayuno de Ramadán es una adoración de Allah sujeta a la intención An-niah antes del Fayr. La intención consiste en tomar la decisión a través del corazón para realizar el ayuno. Decirla verbalmente es Bidah (innovación). No es necesario renovar la intención cada noche de Ramadán. Es suficiente hacerlo al comienzo del mes.
2.-As-siwak -es un palillo extraído de raíces de ciertos árboles y es utilizado para limpiar los dientes- es sunnah durante todo el mes de Ramadán.
Aishah (Radialahu anhu) dijo:
“He visto al Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) utilizar As-siwak innumerablemente durante el día, en Ramadán.”
3.-Si el musulmán es herido o sin querer, el agua le llega a la garganta, esto no afecta en nada el ayuno y puede seguir ayunando sin problemas.
4.-Para el viajero es permitido no ayunar y recuperar los días que no ayuno, una vez que termine Ramadán, siempre y cuando el viaje cumpla con las condiciones establecidas –islámicamente hablando- que sea la distancia de hacer salat Qasr y que el musulmán haya pasado el límite de la ciudad y los edificios de la misma.
5.-El enfermo le es permitido romper su ayuno si éste le causa daño o si necesita tomar remedios, recuperara los días no ayunados una vez que termine Ramadán.
Si la enfermedad es incurable que no ayune más y que alimente, por cada día no ayunado, a un pobre de la comida habitual de la gente local (trigo o arroz) y que la medida sea la de un: Mud que es 510 gramos de un buen trigo o lo equivalente de otro alimento.
6.-Las madres que amamantan y las embarazadas si temen por sus vidas o la de sus hijos tiene que dejar de ayunar y recuperaran los días no ayunados cuando puedan.
7.-El anciano que no puede ayunar que no lo haga y que, por cada día no ayunado ofrezca un Mud de alimento a los pobres.
Las obras a realizarse en el mes de Ramadán.
1.-Quiam al lail o sea: rezar por la noche voluntariamente.
Allah dijo:
“Y a los que se levantan para adorar a Allah prosternados y de pie.”
Y dijo:
“Sus costados se apartan de los lechos, invocado a Allah anhelando su recompensa y temiendo su castigo y de lo que los hemos agraciado gastan en aras del Señor. Ningún alma sabe lo que le será otorgado de delicia como recompensa por lo que hicieron.”
En los dos Sahih, Aishah dijo que el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) en una de las noches –de Ramadán- rezó, en la mezquita y rezaron detrás de él algunos musulmanes; la noche siguiente se aumento considerablemente el número de los musulmanes que rezaban guiados por él, en la tercera y cuarta noche se juntó una numerosa cantidad de musulmanes, pero el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) no salió para liderarlos en la oración. Al día siguiente, dijo a sus compañeros:
“He sabido de vuestra reunión, en masa, para rezar conmigo, pese a ello no salí por temor de que la oración por la noche –en Ramadán particularmente- les será obligatoria-“
El Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“El musulmán que revive las noches de Ramadán rezando por y para Allah será perdonado de todos sus pecados.”
En los dos Sahih se relató que Aishah (que Allah esté complacido con ella) fue consultada sobre el modo de la oración del Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) en Ramadán. Contestó: Tanto en Ramadán como en los otros meses, no rezaba nada más que once Rakaat.
Según Al Bujarí y de acuerdo con el relato de Ibn Abbas (Radialahu anhu) el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) rezaba trece Rakaat durante la noche.
Las oraciones por las noches de Ramadán fueron denominadas:
Salat At-Tarawih –Oración del descanso- porque los musulmanes las hacían muy largas, y cada vez que terminaban de hacer cuatro Rakaat, se sentaban a descansar.
El hombre musulmán no debe dejar de hacer: Salat At-Tarawih para que así, gane la recompensa de Allah tampoco debe irse antes de que el Imam terminase esta oración y la del Witr también para obtener, de este modo, una recompensa completa consistente en innumerables Hasanat equivalentes a que hubiese rezado toda la noche.
Al respecto, el Profeta Muhammad dijo:
“El musulmán que comienza su oración y la termina junto con el Imam, Allah le registra para sí Hasanat como si hubiese rezado toda la noche.” (Transmitido por los autores de As-Sunan y catalogado correcto).
Las mujeres musulmanas, de igual manera, pueden acudir a las mezquitas para realizar esta Salat siempre y cuando salgan, de su casa de acuerdo con las reglas islámicas, pues el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“No impedís a las siervas de Dios el ingreso a las mezquitas.”
Hay que recalcar que, los seguidores virtuosos del Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) aplicaban estas reglas.
La mujer musulmana debe irse a la mezquita vestida acorde con el Islam, sin perfumes, ni atavíos innecesarios y no debe elevar la voz ni exhibir sus encantos femeninos.
Al respecto, Allah dijo:
“Y que no muestren sus encantos salvo lo que de naturaleza se ve.”
2.-Lectura del Corán.
Allah dijo:
“Los que leen el Libro de Allah establecen As-Salat y gastan de lo que les proveemos en secreto y públicamente, esperando un negocio que no tiene pérdida. Para que les pague la recompensa que les corresponda y los aumente su favor; es cierto que El es Perdonador y Agradecido.”
Según el Sahih Al Bujarí, Suman ibn Af-fan (Radialahu anhu) relató que el Profeta Muhammad (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“El mejor de vosotros es el que aprende el Corán y después lo enseña.”
En los dos Sahih, Aishah (Radialahu anhu) dijo que el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“El musulmán que es hábil en la lectura del Corán, estará junto con los virtuosos y generosos y el que le es difícil la lectura del Corán, tendrá dos recompensas.”
La primera recompensa es por la lectura en sí, mientras que la segunda recompensa es por la dificultad causada por leer de un modo óptimo.
Según el Sahih de Muslim, relató Abu Imamah (Radialahu anhu) que el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“Que lean el Corán, porque el Día de la Resurrección vendrá a interceder a favor de los suyos.”
Abdullah Ibn Masuud relató que el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“El musulmán que lee una sola letra del Libro de Allah, tendrá una Hasanat y ésta se multiplica por diez. No digo que Alif, Lam, Mim, es una sola letra, sino cada uno de éstas es letra.” (Transmitido por: At-Tirmidi y catalogado: Bueno y Correcto).
3.-El esfuerzo en los diez últimos diez días de Ramadán y Lailatul Qadr.
Allah dijo:
“Es cierto que hemos hecho descender el Corán en la noche del Decreto. ¿Y cómo hacerte saber qué es la noche del Decreto? La noche del Decreto es mejor que mil noches.”
Y dijo:
“Lo hicimos descender en una noche bendita; en verdad somos advertidores. En ella se distribuye todo asunto sabio.”
La noche del Decreto goza de muchas virtudes, de las cuales citamos las siguientes:
En ella Allah, hizo descender el Corán que es guía para la humanidad y razón de la felicidad en este mundo y en el Otro.
1.-Es mejor que mil meses
2.-En ella, los ángeles descienden y cuando ellos lo hacen, traen el bien, las bendiciones y la misericordia de Allah.
3.-Es noche de Paz. En la misma, el siervo de Dios se salva del castigo gracias a su obediencia a Dios.
4.-Revivir esta noche, por y para Allah, es motivo del Perdón divino.
La noche del Qadr –Decreto- se encuentra en las últimas noches de Ramadán.
Al respecto el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“Buscadla en las últimas diez noches de Ramadán.”
Es más próxima a ser las noches impares que las pares y en las últimas siete noches que el resto y en la noche vigésima séptima. La noche del Decreto no es fija todos los años, sino variable. A veces es la noche veintisiete, en un año, pero en el otro es la del veintinueve y en el tercero, es la del veinticinco. Todo esto de acuerdo con ordenes divinas.
Al respecto, el Mensajero de Allah (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“Tratad de encontrarla en las últimas nueve noches, en las últimas siete o en las últimas cinco.” (Transmitido por: Al Bujarí).
Este último es recalcado en todos los hadices correctos, en cuanto al tiempo de la noche del Decreto.
Allah no nos dio a conocer con exactitud la noche del Decreto para que el musulmán se esforzase al máximo durante Ramadán y especialmente durante los últimos diez días del mismo. Por ello, el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) al ver acercarse los últimos diez días de Ramadán, abandonaba todo contacto con sus mujeres, pasaba todas las noches rezando y hacía levantar a los miembros de su familia para las oraciones.
En cuanto a las súplicas que podemos hacer en esta noche, no hay nada mejor que lo que dijo el Profeta al ser preguntado por Aishah (Radialahu anhu):
“Si yo llego a enterarme que estoy en la Noche del Decreto, ¿Qué debo decir? Respondió: Di: ¡Allah Nuestro!, Tú eres Perdonador, amas el Perdón, Perdónanos.”
4.-Al Itikaf. Es la permanencia en las mezquitas para adorar a Allah ¡Altísimo sea!. El Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) hacía Al-Itikaf y continuó haciéndolo en los últimos diez días de Ramadán hasta tu fallecimiento.
5.-Al-Umrah. Es la visita a la Casa sagrada de Allah, cumpliendo con la corrida entre As-Safa y Al-Maruah y haciendo la circunvalación alrededor del Cava.
El Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“Hacer Umrah en Ramadán es equivalente a una peregrinación conmigo.” (Transmitido por: Abu Daud).
Conductas durante el Ayuno
Entre las conductas, se encuentra la adoración a Allah sea esta adoración verbal o corporal.
La más importante de estas adoraciones es: As-salat.
Es uno de los pilares del Islam, viene después del testimonio de fe. El dejar de cumplir con As-salat constituye una razón para recibir el castigo de Dios y además es totalmente contrario a: At-taqua que es el cuidado de la ley de Allah y el espeto a sus órdenes.
Allah dijo:
“Después les sucedió una generación que abandonó As-salat y siguió las pasiones; pronto encontrarán su castigo infernal. Excepto los que se retractaron, creyeron y obraron con rectitud, pues ellos entrarán en el jardín y no se les hará injusticia en nada.”
Entre las conductas del musulmán en Ramadán, se encuentra la lejanía de todas las prohibiciones que tanto Allah como Su Profeta nos han advertido.
Está también el no mentir, no hablar mal de otro durante su ausencia, conocido como: Alghaibah. No propagar: An-namimah, es decir: llevar las palabras de una persona a otra con el ánimo de sembrar la discordia entre sí.
Alejarse totalmente del engaño, de la música, sea cual será su origen, y es más fuerte aún su prohibición sí es acompañada por canciones que despiertan en la persona ciertas pasiones y realizadas por cantantes de bellas voces,
Allah dijo:
“Hay gente que compra palabras frívolas para extraviar del camino de Allah sin conocimiento y las toman a burla. Esos tendrán un castigo infame.”
Ibn Masud (Radialahu anhu) al ser consultado sobre esta aleya, dijo:
¡Juro por Allah que no hay dios más que ÉL!, que esto se refiere al canto.
El Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) nos advirtió del canto y lo relacionó con el adulterio, dijo:
“Surgirá gente de mi nación que encontrará lícito el adulterio, el uso de la seda, el uso de la música y el consumo del alcohol.” (Transmitido por: Al Bujarí).
El musulmán debe, entonces, alejarse de todas las prohibiciones, porque anulan el ayuno o por lo menos disminuyen la recompensa divina.
Entre las conductas del ayuno, está, también, As-sahur, es decir comer antes del comienzo del ayuno y es antes del Adhan del Fayr.
Al respecto, el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“Lo que distingue nuestro ayuno del de la gente del Libro, es: As-sahur.”
Y dijo:
“Comed As-sahur porque en el está la bendición.”
Y dijo:
“En As-sahur está toda la bendición, que no lo dejen aunque sea solamente un sorbo de agua, porque Allah y los ángeles rezan por los que realizan As-sahur.” (Transmitido por el Imam Ahmad y Al Munziri dijo es de una cadena de transmisión sólida).
Entre las conductas apreciadas, está apresuramiento para romper el ayuno, una vez su lapso predeterminado se acabe.
Sahl Ibn Saad (Radialahu anhu) dijo que el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“La gente seguirá bien siempre y cuando se apresure en el momento de romper el ayuno.”
También es recomendable leer el Corán, hacer Dhirk –recordación- y realizar súplicas al Señor-
Ibn Juzaimah e Ibn Hab-ban dijeron que el Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) dijo:
“Existen tres clases de personas que Allah no rechaza sus súplicas: El ayunante hasta que termine su ayuno, un Imam justo y la súplica del oprimido.”
También hay que hacer caridad y practicar la benevolencia con los demás.
De acuerdo con los dos Sahih. Ibn Abbas (Radialahu anhu) dijo:
“El Mensajero (Assalalahu alayhi wa Salaam) era el más generoso entre la gente y lo era aún más en Ramadán cuando se encontraba con Gabriel para estudiar –con él- el Corán. El Mensajero (Assalalahu alayhi wa Salaam) al encontrarse con Gabriel era más generoso que el buen viento.”
Su generosidad era múltiple, a veces otorgaba el saber, sacrificaba a sí mismo o su dinero para solucionar los problemas de la gente y alimentar a los hambrientos. El Profeta ayudaba a los adoradores y mucho más.
Vida de virtuosos durante Ramadán
Allah dijo:
“Los siervos del Misericordioso son aquéllos que caminan por la tierra humildemente y que cuando los ignorantes les dirigen la palabra, dicen: Paz. Y los que pasan la noche postrados y en pie, para complacer a Allah.”
El Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam) y sus compañeros posteriormente revivían las noches.
Aishah (Radialahu anhu) dijo:
“No dejes de rezar por las noches, pues, el Mensajero de Allah (Assalalahu alayhi wa Salaam) no lo dejaba y a veces al sentirse enfermo o cansado, rezaba sentado.”
Omar Ibn Al Jat-tab (Radialahu anhu) rezaba por las noches y a la medianoche despertaba a los suyos para rezar diciéndoles: As-salat, As-salat y les recitaba esta aleya coránica:
“Ordena a tu gente As-salat y persevera en ella. No te pedimos sustento, Nosotros te sustentamos. Y el buen fin pertenece al temor de Allah.”
Los virtuosos ofrecían el alimento y para ellos, ocupaba un elevado lugar más que ciertas Ibadan –adoraciones- más aún a veces estando ellos mismos estaban en ayuno ofrecían, a los demás, los que tenían para sí. Entre éstos, se encuentra:
Ibn Omar, por ejemplo, rompía su ayuno junto con los pobres y necesitados y al saber que algún miembro de su familia cerró las puertas para impedir el ingreso de los pobres, seguía ayunando y no comía por la tristeza causada.
Omar Ibn Al Jat-tab (Radialahu anhu) dijo:
El Mensajero de Allah (Assalalahu alayhi wa Salaam) nos ordenó gastar nuestro dinero en aras de Allah, yo poseía dinero, me dije: Hoy puedo ganarle a: Abu Bakú y llevé la mitad de mi dinero donde el Profeta, él me dijo_
-¿Qué dejaste para tu familia?-
La otra mitad. Le conteste.
Abu Bakú llevó todo lo que tenía y al ser preguntado –por el Profeta de Dios- a cerca de lo que dejó para los suyos, respondió:
Les dejé bajo el cuidado de Allah y de Su Mensajero.
Omar comentó diciendo: Nunca pude ganarle a Abu Bakr.
Az-zuhari –Que Allah se apiade de su alma- al recibir el mes de Ramadán, decía: Es el mes de la recitación del Corán y del alimento a los pobres.
Malik –Que Allah se apiade de él- al recibir el mes de Ramadán, dejaba de leer los hadices y abandonaba las sesiones del saber y comenzaba a leer el Corán mirando en el: Mushaf.
Catada –Que Allah se apiade de él- fuera del mes de Ramadán, completaba la lectura del Corán cada siete días y en Ramadán lo hacía cada tres días, pero en los últimos diez días, lo hacía, ya, cada noche.
Ibrahim An-najli –Que Allah se apiade de él- completaba la lectura de todo el Corán- durante Ramadán- cada tres noches y en los últimos días, lo hacia cada dos noches.
Al-Asuad –Que Allah se apiade de él- Leía el Corán completo cada dos noches a lo largo de Ramadán.
Zakat Al Fitr
Allah ¡Altísimo sea!, prescribió: Zkat Al Fitr –es un modo de purificar su ayuno- antes del término del mes de Ramadán y antes de la oración del: Eid. En ella –Zkat Al Fitr- hay beneficios para los pobres y conservación de su dignidad en los días de la fiesta. De este modo, pueden participar, realmente, en las celebraciones del: Eid y junto con los ricos festejan jubilosamente.
Zakat Al Fitr es una demostración de generosidad y hermandad y es una manera de agradecer a Allah, por habernos ayudado para cumplir con el ayuno de los días de Ramadán y con las oraciones nocturnas del mismo mes.
Es una obligación a todo musulmán: Mayor, menor, hombre, mujer, libre o esclavo –cuando existía la esclavitud-.
Abdullah Ibn Omar (Radialahu anhu) dijo:
“El Mensajero de Allah ordenó Zakat Al Fitr consistente en: Saa –es una medida, equivalente a 2,5 kilogramos aproximadamente- por persona, sea este Saa de dátiles o de cebada.”
Zakat Al Fitr tiene que ser alimento comestible para humanos, sea éste trigo, arroz, pasas o leche en polvo.
Abu Saíd Al Judarí (Radialahu anhu) dijo:
“Durante la vida del Profeta (Assalalahu alayhi wa Salaam), solíamos hacer nuestro Zakat Al Fitr del alimento de la época y éste era: Saa de cebada, leche en polvo y dátiles.” (Transmitido Al Bujarí).
Su tiempo:
Una vez el sol se pone del último día de Ramadán, hay que pagar este tipo de: Zakat. También se puede pagar antes de: Salat Al Eid. Este último es lo mejor, siempre que se puede. De igual modo, se puede realizar uno o dos días antes del: Eid.
Al concluir, quisiera decir a mis hermanos que el mes de Ramadán está a favor nuestro o en contra, esto de acuerdo a las acciones realizadas en el mes. Quien –de vosotros- ha obrado bien, que agradezca a Allah y que espere una gran recompensa y quien no, que se vuelva a Allah, porque Allah perdona a los arrepentidos.
Rogamos a Allah para que nos dé fuerzas para recordarle, agradecerle y adorarle como corresponde. Y que nos otorgue vida para ayunar el mes de Ramadán. Y que al término de este mes nos habrá perdonado y nos habrá liberado del infierno.
¡Allah Nuestro!, Bendiga y salude a nuestro Profeta Muhammad!
Recopilado y preparado por
Quien anhela el Perdón de Allah, Sheij:
Nasser Ibn Muhammad Al-Moqbel
Imam de la mezquita
Del Centro Islámico Cultural
“Custodio de las dos sagradas mezquitas”
Rey Fahd.
En:
Buenos Aires-Argentina
1422 de la hégira-2001 D.C.
Traducido por: Dr. Sami El Mushtawi
Reglas respecto a los sueños húmedos en Ramadán.
Pregunta: Si una persona quien está ayunando tiene un sueño húmedo durante el día en Ramadán ¿ello nulifica su ayuno o no, y debería él llevar a cabo la purificación ritual (del ghusl)?
Respuesta: Si uno quien está ayunando tiene un sueño húmedo durante el día en Ramadán, entonces su ayuno es bueno y no es afectado por el sueño húmedo, porque él no lo ha hecho intencionalmente. De cualquier forma es obligatorio el llevar a cabo la purificación ritual (ghusl) para llevar a cabo la oración. El ser pronto en llevar a cabo la purificación ritual es mejor, pero no obligatorio.
Y Alláh sabe mejor.
Fatwa Ramadhan, Volumen 2, Página 440, Fatwa No.365;
Al-Muntaqa min Fatwa ash-Sheik Salih ibn Fawzaan, Volumen 3, Página 162.
Tomado de: http://www.fatwa-online.com/
Traducido por: Musa Abdullah Reyes.
Para: http://www.islam-mexico.net
El Doctor me pidió producir semen para análisis, así que tuve que masturbarme
Pregunta: les informo que en el mes de Ramadán en el año de 1410 AH (1989 DC), yo tuve una cita en el hospital. El doctor tratante me pidió producir algo de semen y me dijo que esto era un imperativo (y que yo tenía que hacer esto) a lo cual yo me sentí de forma inconveniente y coercido tal que yo tuve que darle algo de semen para la prueba. Esto fue durante el día en Ramadán. Produje el semen por masturbación, sabiendo que no tenía otra oportunidad de regresar al hospital y ese día en particular era un de los que en el hospital me había sido dada una cita para ello. También esto fue para un análisis para mi esposa y yo. Oh Noble Sheik, yo requiero que usted me dé una fatwa para esto ¿y hay alguna otra expiación que recuperar el ayuno (nulificado) (para ese día) porque yo tenía conocimiento de lo que estaba haciendo?
Respuesta: Si la situación es como usted la ha mencionado, entonces es obligatorio recuperar el ayuno por el día que usted se masturbó y no hay expiación sobre lo que usted hizo.
Y con Alláh yace todo el éxito, y que Alláh envíe oraciones y salutaciones sobre nuestro Profeta Muhammad (Assalalahu alayhi wa Salaam) y su familia y sus Compañeros.
El Comité Permanente para la Investigación Islámica y Fatwa, comprendiendo:
Presidente: Sheik Abdul Aziz ibn Abdullah ibn Baz;
Presidente Diputado: Sheik Abdur-Razaq Afifi;
Miembro: Sheik Abdullah Ibn Ghudayan
Fatwa Ramadan, Volumen 2, Página 448, Fatwa No. 375;
Fatwa al-Lajnah ad-Daimah lil-Buhuth al-Ilmiyah wal-Ifta, Fatwa No. 113476.
Tomado de: http://fatwaonline.com
Traducido por: Musa Abdullah Reyes H.
Para: http://www.islam-mexico.net
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Hermana que se masturbó durante el ayuno
Pregunta: Cuando tenía 14 y 15 años de edad acostumbraba masturbarme durante en día en el bendito mes de Ramadán por un número de días. No sé cuantos. Yo era ignorante acerca de que esto fuera Haram en Ramadán y en otros meses y acostumbraba ser ignorante de que esto fuera conocido como masturbación. Así que acostumbraba hacer ablución y rezar sin hacer la purificación ritual (ghusl). ¿Cuál es la regla respecto a mis oraciones y ayunos? ¿Es obligatorio para mí el repetir la oración y el ayuno, sabiendo que no sé cuántos días hacer esto? ¿Qué es obligatorio para mí?
Respuesta: Primeramente: es impermisible (Haram) el masturbarse (usar la mano de uno en tal manera como para satisfacer los deseos de uno, resultando en la excreción de esperma, o para las hermana, como es en este caso, cualquier descarga). ¡Durante el mes de Ramadán lo es aún más!
Segundamente: es obligatorio sobre ustedes el recuperar los días que rompieron el ayuno debido a la masturbación, porque esta (acción) nulifica en ayuno. También, procuren trabajar duro en cuántos días fue que ustedes rompieron su ayuno.
Terceramente: es obligatorio hacer expiación alimentando a una persona necesitada con un medio saad de cebada o lo que sea similar a ello de lo cual sea aceptado como la norma en la tierra. Esto es también para cada día que ustedes perdieron si ustedes retrasaron su ayuno hasta la llegada del siguiente Ramadán.
Cuartamente: Es obligatorio el lleva a cabo el ghusl si ustedes se masturbaron como han declarado, y no es suficiente hacer ablución si cualquier líquido fue excretado.
Quintamente: es obligatorio hacer las oraciones las cuales ustedes rezaron sin llevar a cabo el ghusl porque la purificación menor no es suficiente en lugar de la purificación mayor.
Y con Alláh yace todo el éxito, y que Alláh envíe oraciones y salutaciones sobre nuestro Profeta Muhammad (Assalalahu alayhi wa Salaam) y su familia y sus Compañeros.
El Comité Permanente para la Investigación Islámica y Fatwa, comprendiendo:
Presidente: Sheik Abdul Aziz ibn Abdullah ibn Baz;
Presidente Diputado: Sheik Abdur-Razaq Afifi;
Miembro: Sheik Abdullah Ibn Ghudayan
Fatwa Ramadan, Volumen 2, Página 449, Fatwa No. 376;
Fatwa al-Lajnah ad-Daimah lil-Buhuth al-Ilmiyah wal-Ifta, Fatwa No. 10551.
Tomado de: http://fatwaonline.com
Traducido por: Musa Abdullah Reyes H.
Para: http://www.islam-mexico.net
Una corta advertencia sobre el Ramadán
Por el Sheik Salih ibn Fawzan al-Fawzan
El Mensajero de Alláh (صلى الله عليه وسلم) fue enviado como una guía y como un líder para la humanidad. Él nos guió a creer en la unicidad de Alláh y nos ordenó obedecer las Órdenes de Alláh y aceptarlo como el Mensajero final enviado a la humanidad. Imán e Islam representan estas dos Creencias.
Nosotros los musulmanes estamos aproximándonos a los benditos días de Ramadán; debemos trabajar duro para complacer a Alláh en estos virtuosos días de Ramadán, mientras seguimos las Órdenes de Alláh y obedecemos a su Mensajero (صلى الله عليه وسلم).
Nosotros deberíamos tener en mente que la adoración que emprendemos en este mes no es fácil de cumplir. En los calientes y largos días de Ramadán, nosotros nos mantenemos hambrientos y sedientos desde el alba hasta el crepúsculo, reprimimos nuestros deseos y evitamos aún estos asuntos, los cuales Alláh ha hecho Halal en los días comunes. Entonces en esta situación, nosotros cumplimos nuestros trabajos diarios y pasamos el día de acuerdo a las Órdenes de Alláh. En la tarde, después del Suhur, esperamos la noche no para escabullirse en la cama y descansar; sino para hacer Qiyam y escuchar el Libro de Alláh; nosotros agradecemos a Alláh y hacemos Suyuds hacia Él. Luego esperamos la llamada del Adhan para iniciar el gran acto de adoración una vez más.
Todo este trabajo duro es hecho solamente para complacer a Alláh y con le esperanza de que este acto de adoración se vuelva una forma para nuestra salvación. Efectivamente, mucha gente pone juntos duros esfuerzos en el mes de Ramadán, PERO ¿Quién es el uno, cuya adoración verdaderamente lo beneficiará en el Día de la Resurrección y protegerá del severo castigo y pruebas de ese Día?
Él es aquel, quien cree en la Unicidad de Alláh y no asocia socios con Él; y lleva a cabo todas sus adoraciones de acuerdo a la guía del Mensajero de Alláh (صلى الله عليه وسلم), porque Alláh dice:
“Verdaderamente, quienquiera que pone socios en la adoración son Alláh, entonces Alláh ha prohibido el Paraíso para él, y el fuego será su morada. Y para los Zalimun (politeístas y malhechores) no hay ayudadores” (5:72).
Esto fue también con lo que Alláh advirtió a sus Mensajeros, Él dijo:
“Pero si ellos han unido en adoración a otros con Alláh, todo eso que ellos acostumbraban hacer no sería de beneficio para ellos” (6:88).
Similarmente, si un lleva a cabo toda su adoración con completa sinceridad pero no aguanta por la vía con la cual el Mensajero de Alláh (صلى الله عليه وسلم) vino, entonces toda su adoración se volverá inválida y no será de beneficio en el Día del Juicio. Alláh dice:
“¡Oh Ustedes quienes creen! Obedezcan a Alláh y Obedezcan al Mensajero y no hagan vanos sus hechos” (47:33).
Pedimos a Alláh el hacer todas nuestras adoraciones por Su Faz y que nos haga fuertes adherentes a la Guía del Mensajero de Alláh.
Localizado en: http://www.salafisocietydc.org/index.php?option=com_content&task=view&id=27&Itemid=24
Tomado de: www.al-meezaan.com.
Traducido por: Musa Abdullah Reyes.
Para: www.islam-mexico.net.
La excelencia de la noche del Qadr
Por el Sheik Abdullah Ibn Salih Al Fawzan[1].
Tomado de: www.troid.org.
Traducido por: Musa Abdullah Reyes.
Para: www.islam-mexico.net.
Abu Hurayra (رضي الله عنه) reportó que el Mensajero de Alláh (صلى الله عليه وسلم) dijo:
“Quienquiera que lleva a cabo la oración de la noche en la noche del Qadr con Imán (creencia firme) y busca la recompensa tendrá perdonados todos sus pecados pasados”[2].
Este hadith es evidencia para la virtud de la noche del Qadr tanto como se lleve a cabo el Qiyam durante ella. Y esto indica que esta es una gran noche, la cual Alláh ha honrado y ha hecho mejor que un millar de meses con respecto a su bendición y las bendiciones encontradas en los actos rectos que son llevados a cabo en ella. Así, esto es mejor que la adoración de un millar de meses y que es equivalente a ochenta y tres años y cuatro meses. Debido a esto, quienquiera que lleve a cabo el Qiyam (la oración nocturna) con verdadera fe y mientras busca recompensa en ella, serán perdonados todos sus pecados pasados. Hay ciertos versos concernientes a esta virtud.
Alláh dice:
“Nosotros lo enviamos (el Corán) en una noche bendita. Verdaderamente Nosotros siempre Estamos Alerta. En ella (en esa noche) es decretado cada asunto del ordenamiento”[3].
Por lo tanto, ella es una “noche bendita” significando que ella posee mucho bien y bendición debido a su mérito y la gran recompensa que espera a aquel quien hace buenos actos en ella. Entre sus bendiciones, es que Alláh reveló el Corán en ella. Alláh dice:
“Verdaderamente, nosotros lo hemos enviado (al Corán) en la noche del Qadr. ¿Y qué hará que ustedes sepan que es la noche del Qadr? La noche del Qadr es mejor que un millar de meses. En ella descendieron los ángeles y el Ruh (Yibril) por el permiso de Su Señor con todos los decretos. (Toda esa noche) hay paz, hasta la aparición del alba”[4].
Ibn Kathir (رضي الله عنه) dijo concerniente al dicho de Alláh: “En ella descendieron los ángeles y el Ruh”.
Esto significa que el descenso de los ángeles se incrementa durante esta noche debido al vasto monto de estas bendiciones. Y los ángeles descienden junto con lo descendiente de bendiciones y misericordia, justo como ellos descienden durante el tiempo cuando el Corán es recitado y abarca las reuniones en las cuales Alláh es recordado y abiertas sus alas para el verdadero buscador de conocimiento, mostrando respeto por él”[5].
Esta noche ocurre solamente en Ramadán, desde que Alláh reveló el Corán en ella. Él nos informa que su revelación ocurrió durante el mes de Ramadán en Su dicho: “Verdaderamente, nosotros lo hemos enviado (al Corán) en la noche del Qadr”[6].
Y Su dicho: “El mes de Ramadán, en el cual fue revelado el Corán”[7].
Esto significa que la revelación de Alláh a Su Profeta Muhammad (صلى الله عليه وسلم) comenzó en él.
La declaración de Alláh: “La noche del Qadr” es también un indicativo del honor y estación de esa noche, como es dicho: “Tal y tal persona tiene un gran Qadr”. La conjunción de “la noche” del Qadr es el tomar parte en una característica hacia ello, así haciendo que ello signifique “una honorable noche”. La palabra “Al-Qadr” también puede estar en referencia al ordenamiento y disposición de los asuntos. Así, eso es estar unidos a la palabra “la noche” sería en orden de denotar un lugar o tiempo para ello. Así que ello significaría “la noche en la cual todo lo que ocurrirá en el siguiente año será decretado”. Esto es similar al dicho de Alláh: “Ahí (en esa noche) es decretado cada asunto del ordenamiento”[8].
Qatada dijo de esto: “Ahí es decretado cada asunto del año (entrante)[9] e Ibn Al-Qayim dijo que esta es la posición correcta”[10].
Lo que parece más correcto es que no haya nada que restrinja la posibilidad de estos dos entendimientos y Alláh sabe más.
Su declaración: “con Imán” significa con firme convicción en lo que Alláh ha preparado para aquellos quienes se levantan en oración durante esta noche magnificente. Y “buscar recompensa” significa buscar la recompensa y el logro de la recompensa.
Así, esta es una gran noche, la cual Alláh ha escogido para comenzar la revelación del Corán. Así el musulmán debe reconocer su peso en valor, al guardarlo y gastarlo en la adoración mientras se tiene firme convicción y se busca la recompensa de Alláh, en orden de que Alláh pueda perdonar todos nuestros pecados previos. Esto es el por qué el Profeta (صلى الله عليه وسلم) nos advirtió acerca de ser descuidados en esta noche y de ser negligentes respecto de gastarla en adoración, porque el musulmán sería prevenido de su bien.
Abu Huraira (رضي الله عنه) reportó que el Mensajero de Alláh (صلى الله عليه وسلم) dijo:
“El Ramadán ha venido a ustedes (un mes bendecido). Alláh ha hecho obligatorio sobre ustedes el ayunar en él. Durante este mes, las puertas del cielo están abiertas, las puertas del infierno están cerradas y los demonios malvados están encadenados. A Alláh pertenece una noche en él, la cual es mejor que mil de meses. Quienquiera que sea prevenido de su bien, entonces él ha sido prevenido”[11].
El musulmán debería suplicar mucho en las noches en las cuales la noche de Al-Qadr es buscada, y él debería suplicar con aquello lo cual el Profeta (صلى الله عليه وسلم) instruyó a Aisha (رضي الله عنها), cuando ella le preguntó: “¿Qué si yo sé en cuál noche, ocurre la noche de Al-Qadr, qué debería decir?”. Él (صلى الله عليه وسلم) dijo: “Di: “¡Oh Alláh! Efectivamente Tú eres el Todo Perdonador. Tú amas el perdón, así que perdóname”[12].
Ibn Kathir (رضي الله عنه) dijo:
“Es recomendado el suplicar mucho en todos los tiempos y (suplicar) más que eso durante el mes de Ramadán, sus últimos diez días y sus días restantes. Y es altamente recomendado el incrementar las invocaciones de uno con esta suplicación: “¡Oh Alláh! Efectivamente Tú eres el Todo Perdonador. Tú amas el perdón, así que perdóname”.[13]
[1] Lo siguiente es tomado de Ahadithus-Siyam: Ahkam wa Adab (páginas 141-143).
[2] Al-Bukhari (4/2550) y Muslim (759).
[3] Surah ud-Dukhan:3-4.
[4] Surat -ul-Qadr 1-5.
[5] Tafsir de Ibn Kathir (8/465).
[6] Surat ul-Qadr:1.
[7] Surat ul-Baqarah:185.
[8] Surat ud-Dukhan:4.
[9] Reportado por At-Tabari en su Tafsir (25/65) tanto como en Al-Baihaqi en su libro Fadail-ul-Awqat (página 216). Su cadena de narración de Sahih.
[10] Ver Shifa-ul-Alil de Ibn Qayim (página 42).
[11] Este hadith es reportado por Ahmad y An-Nasai. Ver la revisión de Ahmad Shakir del Musnad (no. 7148) y el Sahih At-Targhib wat Tarhib de Al-Albani (1490) tanto como Tamam-ul-Manah (395).
[12] Reportado por At-Tirmidhi e Ibn Mayah con una cadena auténtica. (nota del editor: la suplicación transliterada del árabe se lee: Alláhumma Inaka Afuwum Tuhibul Afwa Fa-afu ani).
[13] Tafsir de Ibn Kathir: 8/472.
¿Cuando es la noche de Al-Qadr?
Imams Al-Albani e Ibn Al-Uthaymin.
La noche de Al-Qadr ocurre en las últimas diez noches de Ramadán durante una noche impar (21ª, 23ª, 25ª, 27ª o 29ª). De cualquier forma los escolares difieren acerca de si está fijada a una de estas noches impares cada año o si ello cambia cada año a una noche impar diferente. Más abajo están los dichos de dos de nuestros grandes escolares, Muhammad Ibn Salih Al-Uthaymin y Muhammad Nasir-ud-Din Al-Albani (que Alláh tenga misericordia sobre ambos).
La noche de Al-Qadr tiene una fecha fijada.
La mejor noche en Ramadán es la Noche de Al-Qadr, basado en el dicho del Profeta: “Quienquiera que lleva a cabo la oración de la noche en la Noche de Al-Qadr con fe firme y mientras busca la recompensa, sus pecados pasados serán perdonados”[1].
Ello es en la vigésima séptima noche de Ramadán de acuerdo a la opinión más fuerte. Una mayoría de los Ahadith cumplen con esto, incluyendo el hadith de Zur Ibn Hubaysh quien dijo: “Yo escuché a Ubay Bin Ka-ab (رضي الله عنه) decir cuando le fue dicho a él que Abdullah Ibn Masud (رضي الله عنه) dijo: “Quienquiera que lleva a cabo la oración de la noche (cada noche) durante el año logrará la Noche de Al-Qadr”. Él (Ubay Bin Ka-ab) dijo: “Que Alláh tenga misericordia sobre él, su intención era que la gente no (aumentara su pereza) y dependiera solamente (sobre una justa noche). Por Aquel de quien no hay deidad merecedora de adoración junto a Él, ello es efectivamente en Ramadán. Y por Alláh yo sé sobre cuál noche es. Ello es sobre la noche en la que el Mensajero de Alláh (صلى الله عليه وسلم) nos ordenó el llevar acabo la Oración de la Noche. Ello es en la vigésima séptima noche. Su signo es que el sol se eleva sobre el brillo de su siguiente mañana sin rayos”.
En un reporte esto es elevado para ser un dicho del Profeta (صلى الله عليه وسلم)[2].
(Imám Al-Albani en su libro Qiyam Ramadán (páginas 18-19)).
La noche de Al-Qadr es para ser buscada.
La noche de Al-Qadr está en las últimas diez noches de Ramadán, basado en el dicho del Profeta (صلى الله عليه وسلم): “Busquen la Noche de Al-Qadr en las diez últimas noches de Ramadán” (Al-Bukhari y Muslim). Y ello cae en una de las noches impares más queen las noches pares, basado en dicho del Profeta (صلى الله عليه وسلم): “Busquen por la Noche de Al-Qadr en las noches impares de las últimas diez noches de Ramadán” (Al-Bukhari). Y ello es más cercano a las últimas siete noches, basado en el hadith de Ibn Umar (رضي الله عنه) que:
“Algunos hombres de entre los Compañeros del Mensajero de Alláh vieron la noche de Al-Qadr en un sueño durante una de las últimas siete noches de Ramadán”. Así que el Mensajero de Alláh (صلى الله عليه وسلم) dijo: “Yo veo que todos sus sueños están de acuerdo que ello (La Noche de Al-Qadr) está en las siete últimas noches” (Al-Bukhari y Muslim). Y ello también está basado sobre el hadith en Muslim de Ibn Umar que el Profeta (صلى الله عليه وسلم) dijo: “Busquen por ello en las últimas diez noches. Pero si uno de ustedes se vuelve débil o es incapaz, entonces no dejen que las restantes (últimas) siete noches lo superen”.
Entre las noches impares en las últimas siete noches, ello está más cerca de la vigésima séptima noche debido al hadith de Ubay Bin Ka-ab (رضي الله عنه) quien dijo: “Por Alláh yo sé sobre cuál noche es. Ello es sobre la noche en la que el Mensajero de Alláh (صلى الله عليه وسلم) nos ordenó el llevar acabo la Oración de la Noche. Ello es sobre la vigésima séptima noche” (Muslim).
La Noche de Al-Qadr no está especificada para una noche fijada a través de todos los años. Más bien, ello constantemente cambia. Así que un año podría ocurrir sobre la vigésima séptima noche por ejemplo y en otro año podría ocurrir sobre la vigésima quinta noche, de acuerdo con la Voluntad y Sabiduría de Alláh. Lo que nos dirige a nosotros a esto es el dicho del Profeta (صلى الله عليه وسلم): “Búsquenla (la Noche de Al-Qadr) cuando resten nueve noches, cuando resten siete noches, o cuando resten cinco noches (21ª, 23ª y 25ª respectivamente sin mención de la 27ª)”.
Al-Haidh Ibn Hayr dijo en Fath-ul-Bari: “La opinión más fuerte es que ello es sobre una noche impar en las últimas diez noches de que ello constantemente cambia”.
Alláh ha escondido el conocimiento de su ocurrencia de Sus siervos fuera de su misericordia para ellos así que ellos puedan incrementar sus acciones en la búsqueda de ello durante estas honorables noches, al rezar, hacer Dhikr y suplicar. Así que ellos crecen e incrementan en la cercanía de Alláh y Su recompensa. Y Él también lo mantiene oculto de ellos como una prueba para ellos para distinguir quien entre ellos procura y hace un esfuerzo para encontrarla y quién es flojo y negligente. Esto es desde que quienquiera que constantemente se esfuerce por algo, él se esforzará él mismo en su búsqueda por ello y se preocupará él mismo en encontrarla y lograrla.
Y quizá Alláh desvele el tiempo de su ocurrencia para algunos de Sus siervos a través de signos y señales, las cuales uno es capaz de ver, justo como el Profeta vio su signo que él estaría postrándose en el barro en la mañana siguiente. Así que llovió en aquella noche y él rezó en la (siguiente) mañana la oración de (el Fayr) en el barro.
(Imam Muhammad Ibn Salih Al-Uthaymin en su libro Mayalis Shahr Ramadan, páginas 106-107).
Localizado en:
http://www.salafisocietydc.org/index.php?option=com_content&task=view&id=38&Itemid=24
Producido por: Al-Ibaanah.com.
Traducido por: Musa Abdullah Reyes.
Para: www.islam-mexico.net.
[1] Reportado por Al-Bukhari, Muslim y otros de la narración de Abu Hurayrah (رضي الله عنه) y por Ahmad (5/318) de la narración de Ubadah Ibn As-Samit (رضي الله عنه). La adición a ello [...] pertenece a él y a Muslim de Abu Hurayrah (رضي الله عنه).
Fuente: Ithaf Ahlil Iman bi Durus Shahr Ar-Ramadán, páginas 119-120.
Por: el Sheik Alamah Salih al Fawzan.
Tomado de: www.al-athariyyah.com.
Traducido (del árabe al inglés) por: Abu Abdillah Hassan Somali.
Traducido (del inglés al español) por: Musa Abdullah Reyes.
Para: www.islam-mexico.net.
La piedad y la humildad de los Salaf.
Cuando el Ramadán se acercaba, los Predecesores Correctamente Guiados (As-Salaf As-Salih) acostumbraban frecuentemente buscar el perdón, arrepentirse ante Alláh, el Altísimo y Majestuoso, y temer que sus (hechos) no fueran aceptados. Ellos acostumbraban esforzarse por sí mismos (en la adoración) en Ramadán y fuera del Ramadán; después de ello, ellos estaban temerosos de que nada de esto fuera aceptado.
Cómo los Salaf se comportaban cuando el Ramadán se acercaba y cuando se alejaba.
Ellos acostumbraban buscar el perdón de Alláh y arrepentirse. Tanto que fue reportado que ellos suplicaban por seis meses que Él les permitiera (a ellos) alcanzar el Ramadán. Si Él les permitía alcanzar el Ramadán, ellos ayunaban, rezaban en la noche y suplicaban por los siguientes seis meses que Él aceptara el mes de Ramadán de ellos.
Signos de que el Ramadán ha sido aceptado.
Siguiendo buenos hechos con lo bueno es un signo de que este (acto) ha sido aceptado, sea perteneciente al Ramadán o a otro que ello. Si el musulmán está en un buen estado después del Ramadán, llevar a cabo muchos buenos actos y acciones rectas, entonces esto es una prueba de aceptación.
Signos de que el Ramadán no ha sido aceptado.
Si lo opuesto es verdad y él sigue al bien con maldad, y tan pronto como el Ramadán ternita él sigue después de esto con pecados, descuido y alejándose de la obediencia de Alláh, entonces esto es una prueba de que ello (el Ramadán) no ha sido aceptado.
Cada persona conoce su verdadera situación después del Ramadán. Así que déjenlos mirar, si ellos están en un mejor estado, entonces déjenlos agradecer a Alláh como esto muestra (que ha sido) aceptado.[U1]
Si su estado es peor, entonces déjenlos arrepentirse ante Alláh y buscar el perdón de Alláh, como esto es una prueba de que ello no ha sido aceptado y es una prueba de negligencia y descuido.
No perder la esperanza en la Misericordia de Alláh.
Pero el esclavo no debería perder la esperanza de la Misericordia de Alláh. Él no debería cerrar la puerta que está entre él y Alláh y perder la esperanza de la Misericordia de Alláh.
“Di: Oh Mis esclavos quienes han trasgredido contra ellos mismos (por cometer actos malvados y pecados). No pierdan la esperanza de la Misericordia de Alláh: Verdaderamente Alláh perdona todos los pecados. Él es el Perdonador, el Misericordioso” (Az-Zumar:53).
Es sobre él, el arrepentirse, buscar el perdón de Alláh y retornar a Alláh, el Altísimo y Majestuoso. Alláh, el Altísimo y Majestuoso, acepta el arrepentimiento de aquellos que se arrepienten.
“Y Él es Aquel Quien acepta el arrepentimiento de Sus esclavos, y perdona los pecados, y Él sabe lo que ustedes hacen” (Ash-Shura:25).
Y que la paz y las bendiciones sean sobre nuestro Profeta Muhammad (صلى الله عليه وسلم).
[U1]llos
¿Qué debería preocuparle a uno durante el mes de Ramadán?
Autor: Sheik Salih Al-Fawzan.
Fuente: Itihaf Ahlil Imán bi Durus Shahri Ramadán.
Producido por: www.al-ibaanah.com
Localizado en:
http://www.salafisocietydc.org/index.php?option=com_content&task=view&id=30&Itemid=24
Traducido por: Musa Abdullah Reyes.
Para: www.islam-mexico.net
Toda la alabanza sea para Alláh por Sus bendiciones y Generosidad. Él nos ha bendecido al permitirnos alcanzar el mes de Ramadán y nos ha hecho capaces de hacer buenos actos por los cuales nosotros podemos acercarnos a Él. Y que la paz y las bendiciones sean sobre nuestro Profeta Muhammad, quien fue el primero en apresurarse a hacer buenos hechos; tanto sobre su familia como con sus Compañeros; aquellos quienes creyeron en él, lo apoyaron y siguieron la luz que le fue revelada a él. Ellos son los exitosos.
Para lo siguiente, entonces:
Yo les aviso a ustedes y a mí mismo el temer a Alláh durante este bendito mes tanto como en cualquier otro mes. De cualquier forma, este mes tiene un mérito especial por el cual Alláh lo ha distinguido, desde que ello es una ocasión única para llevar a cabo buenos hechos. El Profeta (صلى الله عليه وسلم) suplicaba a Alláh que le permitiera ser capaz de alcanzar el Ramadán. Así que cuando el mes de Rayab venía, él (صلى الله عليه وسلم) decía: “¡Oh Alláh! Bendícenos durante Rayab y Shabán y permítenos alcanzar Ramadán”.
El Profeta (صلى الله عليه وسلم) también daba a sus Compañeros las buenas noticias de su arribo y les explicaba sus muchas virtudes, diciéndoles: “¡Oh gente! Un gran y bendito mes ha venido sobre ustedes”.
El Profeta (صلى الله عليه وسلم) animaba a sus Compañeros a esforzarse duro en llevar a cabo buenos hechos durante este mes; ambos, los obligatorios y los recomendados, tales como la oración, la caridad, mostrar bondad y suavidad, ser pacientes mientras se obedece a Alláh, gastar el día de uno con el ayuno, la noche de uno con la oración y las horas de uno con la recitación del Corán y recordando a Alláh.
Así que no gasten tiempo en ser descuidado y rechazar, como es el caso con aquellos miserables quienes han olvidado a Alláh y así que Él les ha causado que se olviden de sí mismos. Tal gente no extrae beneficio del paso de las ocasiones para hacer el bien, ni ellos llevan a cabo su santidad o conocen su valor.
Mucha gente no conoce este mes excepto como un mes para varios tipos de comidas y bebidas. Así que ellos se extienden grandemente en dar a sus almas lo que ellas desean. Y ellos se exceden en comprar tipos caprichosos de comidas y bebidas. Es bien conocido que la ración de demasiada comida y bebida causa que uno sea flojo con los actos de adoración. Lo que es requerido para el musulmán es que disminuya en su ración de comida y bebida, tal que sea enérgico cuando venga a los actos de adoración.
Alguna gente no conoce el mes de Ramadán excepto como un mes en el cual uno duerme durante el día y se queda levantado toda la noche haciendo cosas que no tienen beneficio o cosas que causan daño. Así que esta gente se queda despierta la mayor parte de la noche o toda ella, luego duermen durante el día aún sobre los tiempos de las oraciones obligatorias. Así que ellos no rezan en congregación o en los tiempos de oración prescritos.
Otro grupo de gente se sienta a la mesa de la cena cuando es tiempo de romper el ayuno y abandonan el llevar a cabo la oración del Maghrib en congregación. Estos tipos de gente no conocen el valor del mes de Ramadán ni se refrenan de violar su santidad al cometer el tipo prohibido de insomnio (durante toda la noche), abandonando las obligaciones y haciendo lo prohibido.
Junto a esta gente están aquellos individuos quienes no ven el mes de Ramadán excepto como una oportunidad para hacer negocios, exhibiendo sus productos y persiguiendo después la vida mundanal, la cual es temporal. Así que ellos están activos en comprar y vender, así gastando todo su tiempo en los mercados y abandonando el Masyid. Y si ellos van al Masyid, entonces ellos están en apuración y angustia. Ellos no se relajan mientras están en el Masyid desde que su gozo y comodidad yace en las áreas comerciales.
Y hay otro tipo de gente quienes no conocen el mes de Ramadán excepto como un tiempo para mendigar en el Masyid y en las calles. Así que ellos gastan la mayor parte de su tiempo yendo y viniendo de aquí y allá y viajando de un país a otro en orden de colectar dinero a través de mendigar y por presentarse a sí mismos como si fueran necesitados cuando de hecho ellos son saludables, y como heridos cuando ellos están de hecho saludables. Tal gente está negando las bendiciones de Alláh sobre ellos y tomando la riqueza de la gente injustamente. Y ellos están gastando su precioso tiempo en cosas que son dañinas para ellos. Así que no hay méritos especiales que puedan ser encontrados en Ramadán para estos tipos de gente.
¡Oh sirvientes de Alláh! El Profeta (صلى الله عليه وسلم) se esforzaba duro durante este mes más de lo que lo hacía en cualquier otro mes. Aunque el Profeta (صلى الله عليه وسلم) era fuerte en llevar a cabo actos de adoración en todos los tiempos, él se liberaba a sí mismo durante este mes de muchos de los deberes, los cuales en realidad eran actos de adoración, dejando estos hechos rectos por (otros) hechos que eran mejores que aquellos. Los Salaf seguían su ejemplo en este respecto y así ellos particularizaban este mes con ambiciones más altas, así manteniéndose ellos mismos desocupados en ello, para que asi ellos pudieran llevar a cabo buenos hechos. Ellos gastaban su noche en la oración del Tahayud y su día en ayunar, remembranza de Alláh y recitación del Corán, frecuentando así el Masyid para ese propósito.
Así que nosotros deberíamos comparar nuestras condiciones a sus condiciones y ver lo extenso de nuestras habilidades en este mes.
Y nosotros deberíamos saber que justo como los buenos hechos son multiplicados durante este mes, entonces similarmente, los actos malvados son peores y su castigo es más grande. Así que deberíamos temer a Alláh y magnificar la santidad de este mes.
“Y quienquiera que magnifica las cosas sagradas de Alláh, esto es mejor para él en la vista de su Señor” (Surah Al-Hayy).
Que Alláh nos conceda a todos nosotros la habilidad para tener declaraciones y acciones rectas. Y que la paz y las bendiciones sean sobre nuestro Profeta Muhammad, tanto como sobre toda su familia y Compañeros.
La aproximación del Ramadán[1].
Por: el Sheik Abdullah Ibn Salih al-Fawzan.
Tomado de: www.troid.org
Traducido por: Musa Abdullah Reyes H.
Para: www.islam-mexico.net
Abu Hurairah reportó que el Mensajero de Alláh (صلى الله عليه وسلم) dijo: “El Ramadán ha venido a ustedes, un bendito mes. Alláh ha hecho obligatorio sobre ustedes su ayuno. En ello, las puertas del cielo están abiertas, las puertas del infierno están cerradas y los malvados demonios están encadenados. A Alláh pertenece una noche en ello, la cual es mejor que mil meses. Quienquiera sea impedido de su bien, entonces él ha sido privado”[2].
Este hadith es una buena noticia para los rectos sirvientes de Alláh, de la venida del bendito mes del Ramadán. El Profeta (صلى الله عليه وسلم) informó a sus compañeros de su venida y esto no fue solo una simple difusión de noticias. Más bien, su intención era darles las buenas noticias de un tiempo magnificente del año, para que así la gente recta quienes son rápidos para hacer (buenos) actos, pueda darle su debida estimación. Esto es porque el Profeta (صلى الله عليه وسلم) explicó en ello (el hadith) que Alláh ha preparado para sus sirvientes de entre las vías hacia el ganar perdón y Su contento y ellas son muchas vías. Así que quienquiera que tenga una evasión del perdón de él durante el mes de Ramadán, entonces él ha sido privado con la más alta privación.
De entre los más grandes favores y bondades que Alláh ha conferido sobre sus sirvientes es que Él ha preparado para ellos ocasiones meritorias para que así ellas puedan servir de prueba para aquellos quienes lo obedecen a Él y una carrera para aquellos quienes corren para competir (por buenos actos). Estas ocasiones meritorias son tiempos para cumplir las esperanzas por esforzarse en la obediencia y rectificar los defectos y deficiencias por la auto rectificación y el arrepentimiento. No hay una sola ocasión de estos virtuosos tiempos, excepto que Alláh haya asignado en ello trabajos de obediencia, por los cuales uno pueda acercarse a Él. Y Alláh posee las cosas más hermosas como regalos, los cuales Él confiere sobre quienquiera que Él desee por su Gracia y Misericordia.
Así que aquel quien logra la verdadera felicidad es aquel quien toma ventaja de estos meses, días y horas virtuosos y se acerca a Su Guardián en ellos, por hacer lo que está prescriben ellos de entre los actos de obediencia.
Así, quizá él será mostrado con una de las muchas bendiciones de aquellas ocasiones y ser ayudado por ellas, con una asistencia que lo salva del Fuego y lo que contenga; tal como su calor ardiente[3].
Ser capaz de alcanzar el Ramadán es una magnificente bondad por sí mismo, conferida sobre aquel quien lo alcanza y se levanta para esta ocasión, al levantarse en oración durante sus noches y ayunando durante sus días. En ello (el Ramadán) él retorna a su Protector; se aleja de desobedecerlo para obedecerlo a Él, de ser negligente hacia Él, para recordarlo a Él, de mantenerse distante de Él para volverse hacia Él en arrepentimiento sumiso.
Un musulmán debe ser consciente de esta bondad y reconocer su magnitud. Porque efectivamente, mucha gente está impedida de ayunar, ya sea porque ellos mueren antes de alcanzar (el Ramadán) o ellos no son capaces de observarlo o porque ellos se oponen y se alejan de ello. Así, aquel quien ayuna debe dar alabanza a su Señor por esta bondad y debería dar la bienvenida a este mes con el gozo y la alegría que un magnificente tiempo del año sobresale de todas las ocasiones para llevar a cabo la obediencia es bienvenido. Él debería esforzarse a sí mismo profundamente en hacer buenos hechos. Y él debería invocar a Alláh para que le garantice el ayunar y levantarse en oración nocturna y que Él lo provea con seriedad, entusiasmo, fuerza y energía en ese mes. Y que Él lo despertara del adormecimiento descuidado, para que así él pueda tomar ventaja de estos virtuosos tiempos de bien.
Es desafortunado encontrar que mucha gente no conoce el valor de esta virtuosa ocasión, ni ellos consideran que sea sagrado. Así que el mes de Ramadán ya no se considera un mes significativo para la obediencia, adoración, recitación del Corán, dar caridad y hacer remembranza de Alláh. Más bien, para alguna gente se vuelve un tiempo significativo para ellos, para diversificar sus comidas y bebidas y para preparar diferentes tipos de platillos antes de que el mes comience. Alguna otra gente no conoce el Ramadán excepto como un mes de adormecimiento y constante recurrir a las reuniones, mientras se duerme durante el día. Esto es hasta el punto de que algunos de entre ellos duermen pasado el tiempo de las oraciones obligatorias, así no rezándolas en congregación o en los tiempos apropiados. Otra gente no conoce el Ramadán excepto como un tiempo significativo para conducirse con asuntos mundanos, no como una tiempo significativo para conducirse con asuntos de la Otra Vida. Así que ellos trabajan afanosamente en ello, comprando y vendiendo, y así ellos se quedan en las áreas del mercado consecuentemente abandonando las Masyids y cuando ellos rezan con la gente, ellos lo hacen de una manera apurada. Esto es porque ellos encuentran su placer en los lugares del mercado. Esto es el extremo que las nociones y puntos de vista (del Ramadán) han sido cambiadas.
Algunos de los Salaf han acostumbrado decir: “Efectivamente Alláh, el Más Alto, ha hecho el mes de Ramadán como una competición para Sus criaturas, en la cual ellos pueden competir con otro hacia Su placer, por medio de obedecerlo a Él. Así, el grupo viene primero y así ellos prosperan y otro grupo viene al final y así ellos fallan”[4].
También, el individuo que no sabe si este es quizá el último Ramadán que él verá en su vida, si él lo completa, cuantos hombre mujeres y niños han ayunado con nosotros el año pasado y ahora ellos yacen ahora enterrados en las profundidades de la tierra, dependiendo de sus buenos hechos, y ellos esperaban ayunar por muchos más meses de Ramadán. Similarmente, nosotros deberíamos seguir su vía. Por lo tanto es sobre los musulmanes el regocijarse en esta ocasión magnificente para la obediencia. Y él no debería renunciar a ello, sino en vez de ellos, ocuparse a sí mismo con lo que lo beneficiará y que causará que su efecto permanezca. Porque qué más es esto sino días numerados en los cuales es ayunado en sucesión y los cuales terminan rápidamente.
Que Alláh nos haga a nosotros, tanto como a ustedes, de entre aquellos quienes están más adelantados en obtener buenos hechos.
[1] Lo siguiente es tomado de Ahadithus-Siyam: Ahkam wa Adab (páginas 13 a 15).
[2] Este Hadith es reportado por Ahmad y An-Nasai; ver la revisión de Ahmad Shakir del Musnad (no. 7148) y Sahih Targhib wat Tarhib de Al-Albani (1490), tanto como Tamam-ul-Manah (395).
[3] Estas son las palabras de Ibn Rayab en Lataif-ul-Marif, página 8.
[4] Lataif-ul-Marif, de Ibn Rayab página 246.
Regalar la recitación de todo el Corán para el Profeta Muhammad (صلى الله عليه وسلم)
Tomado de: http://www.fatwa-online.com/fataawa/innovations/funerals/0000513_3.htm
Traducido del inglés al español por: Musa Abdullah Reyes.
Para: www.islam-mexico.net.
Pregunta: En la última noche del Bendito mes de Ramadán, del año 1400 H (1979), el Imám dejó a la congregación y completó la recitación (entera) del Corán y dijo: “El completo (de la recitación) de este Corán es regalada a la alma de nuestro maestro, nuestro líder y nuestro Profeta Muhammad, el puro”. ¿Cuál es la regla de la Sharía con respecto a esto?
Respuesta: No es permisible el regular (ninguna) recompense al Mensajero (صلى الله عليه وسلم), ni el complemento (de la recitación) del Corán u otra que esto. Esto es porque los Piadosos Predecesores de entre los Compañeros (رضي الله عنهم) y aquellos después de ellos, no hicieron desde que los actos de adoración son Tawqifiyah. Él (صلى الله عليه وسلم) dijo:
“Cualquiera quien hace un acto el cual no está de acuerdo con nosotros, entonces ello será rechazado” (Narrado por Muslim).
El Profeta (صلى الله عليه وسلم) recibe la misma recompensa por todos los actos rectos hechos por su Ummah porque él es aquel quien invitó y les mostró la guía a ellos. Ha sido autentificado sobre su (صلى الله عليه وسلم) autoridad que él dijo:
“Quienquiera que dirige (hacia algo que es) bueno, entonces para él es la recompensa igual a aquel que ha hecho eso (este acto bueno)”. Muslim lo reportó en su Sahih del hadith de Abu Masud Al-Ansari.
Y con Alláh yace todo el éxito y que Alláh envía oraciones y salutaciones sobre nuestro Profeta (صلى الله عليه وسلم) y su familia y Compañeros.
El Comité Permanente para la Investigación Islámica y Fatawa.
Al-Bidu wal-Muhdathat wa ma la Asla lahu - página 293.
Fatawa al-Laynah ad-Daimah lil-Buhuth al-Ilmiyah wal-Ifta. - Fatwa No. 3582.
Una explicación de las cosas legisladas en el final del Ramadán
Por el Sheik Allamah Salih Al-Fawzan.
Tomado de: www.al-athariyyah.com
Traducido por: Musa Abdullah Reyes H.
Para: www.islam-mexico.net
Toda la alabanza es debida a Alláh, a través de Cuyas Bendiciones todas las buenas cosas son cumplidas. Él apuntó un final para todo lo que existe en este mundo, una muerte para todo lo que es viviente. Así que la gente con fe puede contemplar sobre esto, y por lo tanto apresurarse a llevar a cabo actos rectos tanto como ellos sean capaces; y no sean embaucados por falsas esperanzas.
Y que la paz y las bendiciones de Alláh sean sobre nuestro Profeta Muhammad, sus Compañeros, quienes eran los mejores compañeros (que uno pudiera tener) y su familia.
Procedamos:
Tomar la oportunidad.
¡Esclavos de Alláh!
Piensen que tan rápido han pasado los días y las noches. Sepan que así como ellos han pasado sus vidas y las páginas donde sus hechos están recopilados. Así que apresúrense a arrepentirse y llevar a cabo acciones rectas antes de que esta maravillosa oportunidad se haya ido.
El Ramadán fue hace unos pocos días.
¡Esclavos de Alláh!
Ayer, el cual fue apenas hace un corto tiempo, ustedes estaban saludando al bendito mes de Ramadán. Hoy ustedes están diciendo sus despedidas, porque ello se está yendo con todo lo que ustedes han hecho en él.
¿A quién hay que felicitar?
Felicitaciones para aquellos para quienes testificará en su favor ante Alláh que ellos estuvieron sobre el bien, intercederá por ellos para entrar en el Paraíso y los libre del Fuego del Infierno.
¿Quién está perdido?
Malditos sean aquellos para quienes testificará en contra debido a su malvado comportamiento, quejándose hacia su Señor acerca de su negligencia y defectos.
¿Cómo decir adiós al mes de Ramadán?
Decir adiós al mes de ayuno y oración por terminarlo en la mejor forma posible, como las acciones son juzgadas en su resultado final.
Quienquiera que haya hecho bien en este mes, entonces déjenlo continuar y quienquiera que haya pecado, entonces es sobre él el arrepentirse y hacer buenos actos en los días restantes, como quizá él no verá otro Ramadán después de este año.
Terminar este mes con bien y continuar llevando a cabo acciones rectas en el resto de los meses (del año), como ustedes han hecho en este mes (de Ramadán).
Verdaderamente el Señor de estos meses es uno, y Él ve y es un testigo sobre ustedes. Él les ordenó a ustedes el obedecerlo a lo largo de todas sus vidas.
Advertencia a aquellos quienes solamente hacen como si ellos hubieran sido ordenados durante el Ramadán.
Quienquiera que haya adorado el mes de Ramadán, entonces ello ha pasado y llegado al final, quienquiera que haya adorado a Alláh, entonces Alláh es el Siempre Viviente y que nunca muere. Por lo tanto continúen adorándolo a Él en todos los tiempos.
Alguna gente adora (apropiadamente) solamente durante el Ramadán. Así que ellos consistentemente asisten a la oración congregacional en el Masyid, ellos recitan mucho Corán y dan caridad de su riqueza. Pero cuando el mes de Ramadán termina ellos se vuelven flojo con los actos de obediencia. Quizá ellos abandonen el Yumuah y el Yama-ah, destruyendo así lo que hayan construido y borrando lo que ellos hayan declarado. Es como si creyeran que esforzándose por ellos mismos en Ramadán expiará la suciedad, los pecados destructivos y el abandono de las obligaciones y su comisión de actos prohibidos.
¿El Ramadán expiará sus pecados?
Ellos no saben (en orden) que para que el Ramadán expíe sus pecados es condicional que los pecados mayores y destructivos sean evitados.
Alláh, el Más Alto, dijo:
“Si ustedes evitan los pecados mayores los cuales les han sido prohibidos, Nosotros expiaremos de ustedes sus pecados menores”[1].
El Profeta (صلى الله عليه وسلم) dijo: “Las cinco oraciones diarias, de Yumuah a Yumuah, de Ramadán a Ramadán expiará lo que hay entre ellos, tanto como los pecados mayores sean evitados”[2]. ¿Cuál pecado es, después del Shirk, más grande que fallar en llevar a cabo la oración? Y el abandono de la oración se ha vuelto un hábito al que mucha de la gente se ha acostumbrado. Esta gente quienes se esforzarán ellos mismos solamente en Ramadán, entonces ello no los beneficiará en el desprecio con Alláh si ellos siguen (en este mes) con desobediencia, el abandono de sus obligaciones y hacer aquello lo cual es impermisible.
Un dicho de uno de los Salaf acerca de la gente que solamente se esfuerza en Ramadán.
Uno de los Salaf fue preguntado acerca de la gente quienes se esfuerzan ellos mismos (llevando a cabo la adoración) solamente en Ramadán y tan pronto como el mes se termina ellos son negligentes (con aquello con lo que les es ordenado) y pecadores.
Él respondió: ¡Qué malvada es este tipo de gente! Ellos solamente conocen a Alláh durante el Ramadán. Sí, porque aquel quien conoce a Alláh le temerá en todos los tiempos.
Diferentes tipos de gente que ayuna durante el Ramadán.
Alguna gente ayuna en Ramadán, rezan, exteriormente se portan bien y se mantienen lejos de los pecados, pero esto no es por la fe o la esperanza por la recompensa; en vez de ello, ellos lo hacen por los elogios y por estar en conformidad con la sociedad.
Él lo considera como una tradición de la comunidad, y esto es hipocresía mayor porque los hipócritas acostumbran llevar a cabo actos de adoración abiertamente solo para mostrarlos a la gente.
Otro individuo considera al Ramadán como una prisión temporal; él no puede esperar hasta que se termine, para que así ellos puedan apresurarse a cometer desobediencia y actos prohibidos. Él está regocijado de que el Ramadán haya terminado, tanto como esto lo sacará de su prisión.
Ibn Khuzaima (رضي الله عنه) reportó en su Sahih sobre la autoridad de Abu Hurairah (رضي الله عنه) que el Mensajero de Alláh (صلى الله عليه وسلم):
“El mes es de acercamiento. El Mensajero de Alláh tomó un juramento. Nunca tuvo un mejor mes para que los musulmanes llegaran y nunca tuvo un peor mes que pasara para los hipócritas que el Ramadán. Alláh escribirá para el creyente su recompensa y hechos opcionales antes de que aún él entre al mes y Él escribirá el pecado y la miseria (para el hipócrita) antes de que entre en él”. Esto es porque el creyente está preparando su fuerza y su riqueza para adorar a Alláh y el hipócrita está preparándose los deseos y sin importarles los creyentes. Ése es el porqué el Ramadán es una gran prueba obtenida por el creyente.
La diferencia entre el creyente y el hipócrita al final del mes.
De cualquier manera, el musulmán está encantado de que el Ramadán haya llegado a su fin porque él lo utilizó para adorar y hacer actos de obediencia. Así que él espera por la recompensa y las bendiciones. El hipócrita por el otro lado, está encantado de que el mes termine para que así él sea libre de cometer actos de desobediencia y (persiga) sus concupiscencias, de las cuales él se ha obstruido durante el Ramadán.
Ése es el porqué el creyente debería seguir sobre lo de el mes de Ramadán, buscando el perdón, el Takbír (Alláh hu Akbar) y la adoración.
El hipócrita sigue al mes de Ramadán con desobediencia, distracción y fiestas musicales, donde ellos cantan y tocan tambores e instrumentos de viento, y él está encantado de que el mes haya partido.
Y la paz y las bendiciones de Alláh sean sobre nuestro Profeta, Muhammad.
La oración de la noche en Ramadán
Por: el Imám Muhammad Nasir-ud-Din Al-Albani[1].
Tomado de: www.troid.org
Traducido por: Musa Abdullah Reyes H.
Para: www.islam-mexico.net.
Yo hablé en detalles acerca de este asunto en mi libro “Salat ut-Tarawih” (páginas 101-115), así que siento que debería abreviar la discusión aquí, en orden de hacerla fácil para el lector y para recordarle:
La primera manera: consiste de trece Rakát, lo cual es comenzado son dos Rakát cortos. De acuerdo a la opinión más correcta éstos son los dos Rakát de la oración de Sunnah ofrecidas después del Ishá, o ellos son dos específicos Rakát por los cuales uno comienza la oración de la noche, como ha sido declarado previamente. Luego uno reza dos Rakát muy largos (después de eso). Luego dos Rakát más son rezados, y luego otros dos Rakát son rezados. Luego dos Rakát más son rezados, y luego otros dos Rakát son rezados. Luego el Witr es hecho con un Raká.
La segunda manera: consiste de trece Rakát. Hay ocho Rakát dentro de ellos, en los cuales uno hace Taslim después de cada dos Rakát. Luego el Witr es hecho con cinco Rakát y uno no se sienta ni hace el Taslim excepto en el quinto Rakát.
La tercera manera: consiste de once Rakát, en los cuales uno hace el Taslim después de cada dos Rakát y luego se reza el Witr al final con un Rakát.
La cuarta manera: consiste de once Rakát, en los cuales uno reza cuatro Rakát y hace un Taslim después de los cuatro. Luego él reza otros cuatro en una manera similar y ello termina con tres Rakát (para el Witr).
¿El Profeta (صلى الله عليه وسلم) se quedaba en la posición sentada después de cada dos Rakát, cuando rezaba una unidad de cuatro Rakát o una unidad de tres Rakát? Nosotros no encontramos una respuesta para esto, pero quedarse sentido para el Tashahud mientras se hace una unidad de tres Rakát no está legislado (en la Religión).
La quinta manera: consiste de once Rakát, en los cuales uno reza ocho Rakát y no se siente en ninguno de ellos excepto por el octavo Rakát. Mientras se siente (en el octavo Rakát) él hace el Tashahud y envía Salat sobre el Profeta (صلى الله عليه وسلم) y luego se levanta otra vez sin hacer el Taslim. Luego él hace Witr con un Rakát y cuando termine, él hace el Taslim. Esto consiste de nueve Rakát. Luego él reza dos Rakát después de aquello mientras está en la posición sentada.
La sexta manera: uno reza nueve Rakát en los cuales el no se siente excepto después del sexto Rakát. Luego él hace el Tashahud y envía Salat sobre el Profeta (صلى الله عليه وسلم) y luego se levanta sin hacer el Taslim. Luego él hace el Witr con tres Rakát y cuando finalice, él hace el Taslim, etc. (el resto es lo mismo que como la manera previa).
Estas son las maneras en las cuales es reportado que el Profeta (صلى الله عليه وسلم) llevó a cabo la Oración de la Noche. Es posible añadir otros tipos de maneras para ello, por sustraer lo que uno desee de cada unidad de Rakát hasta que lo acorte a un solo Rakát, actuando sobre el hadith previamente mencionado del Mensajero de Alláh (صلى الله عليه وسلم): “Así que quienquiera que desee, déjenlo rezar Witr, con cinco Rakát, y quienquiera que desee, déjenlo rezar Witr, con tres Rakát, y quienquiera que desee, déjenlo rezar Witr, con un Rakát”.
Así que si uno quiere, él puede rezar estos cinco Rakát o tres Rakát con una sentada y un Taslim, como está declarado en la segunda manera. Y si él quiere, él puede hacer Taslim después de cada dos Rakát, como está declarado en la tercera manera, y esta es preferida.
Como para la unidad de cinco Rakát o tres Rakát al sentarse después de cada dos Rakát y no haciendo el Taslim, luego nosotros no encontramos ningún reporte auténtico que el Profeta (صلى الله عليه وسلم) acostumbraba hacer esto. El Asl (fundamento) es que ello es permisible pero desde que el Profeta (صلى الله عليه وسلم) nos prohibió de rezar Witr con tres Rakát indicando la razón para ello al decir: “Y no la asemejen con la oración del Maghrib”[2]. Así que entonces cualquiera que rece el Witr en tres Rakát no debe asimilarlo a la oración del Maghrib. Esto puede ser hecho de dos formas:
1.- Haciendo el Taslim entre el número par e impar de Rakát (entre el segundo y el tercer Rakát). Esto es lo que es más fuerte y preferido.
2.- Uno no se sienta entre el número par e impar (él reza tres Rakát seguidos con un Taslim). Y Alláh sabe mejor.
[1] Lo siguiente es tomado de “Qiyam Ramadán” (páginas 28-30).
[2] Reportado por At-Tahawi, Ad-Daraqutni y otros. Ver At-Tarawih (páginas 99 y 110).
Rezar Salatul-Ishá cuando la gente está rezando Tarawih
Por: Al-Imám Abdul-Aziz bin Abdillah bin Baz (رحمه الله)
Fuente: Al-Fatawa min Kitabid-Dawah, Vol. 1, p. 62.
Tomado de: www.assalafi.com/Fiqh
Traducido (del árabe al inglés) por: Abu Sumayah Aqil Walker.
Traducido (del inglés al español) por: Musa Abdullah Reyes.
Para: www.islam-mexico.net
Pregunta: Un hombre viene a la oración congregacional mientras ellos están rezando Tarawih[1], y él supo esto (que ellos la estaban rezando), así que ¿él reza con ellos con la intención de la oración del Ishá, o reza (el Ishá) solo?
Respuesta: No hay daño en que él rece con ellos con la intención de Al-Ishá, de acuerdo a las más correctas de las opiniones de los escolares. Luego, cuando el Imám haga el Taslim (para concluir la oración), él se levanta y completa su oración. Esto es debido a lo que es confirmado en los dos Sahihs de Muadh bin Yabal (رضي الله عنه) que él acostumbraba rezar con el Profeta (صلى الله عليه وسلم) para el Salatul-Ishá, luego él volvía a su gente y los lideraba en esa misma oración y el Profeta (صلى الله عليه وسلم) no se oponía a eso. Por lo tanto, esto prueba la permisibilidad de la oración de uno que está rezando una oración obligatoria detrás de uno quien está rezando una oración opcional. También, en el Sahih es reportado que el Profeta (صلى الله عليه وسلم) que en algunas formas de Salatul-Khawf (la oración del miedo durante la guerra) él lideró a un grupo en dos Rakás, luego lideró a otro grupo en dos Rakás. En este caso la primera oración era su oración obligatoria y la segunda oración era una oración opcional para él, mientras que ellos estaban rezando so oración obligatoria (detrás de él). Y Alláh es el Dador del éxito.
[1] Tarawih, la oración opcional de la noche que es rezada después del Salatul-Ishá durante el mes de Ramadán. Es considerada parte de la oración de la noche (Qiyam ul-Lail) pero se ha vuelto conocida entre los musulmanes durante el mes de Ramadán particularmente, como Salatul-Tarawih.